Un punto es suficiente

Barcelona y Deportivo no necesitan más que un empate para seguir los pasos del Real Madrid y asegurarse una plaza en la segunda fase de la Liga de Campeones. Los catalanes, líderes del grupo F, buscarán el punto que les falta en Lyón, frente al Olímpico (20.45, Canal Plus y VD); los gallegos, también primeros en el grupo G, lo harán en su feudo, ante el Lille (20.45, TVE 1).

Nunca en los últimos años lo ha tenido mejor el Barcelona para alcanzar la segunda fase de la Liga de Campeones. A los azulgrana, eliminados a las primeras de cambio en tres de las cuatro últimas ediciones de la máxima competición continental, les basta un punto para cerrar su clasificación sin esperar a la última jornada, en la que, en todo caso, recibirán al Fenerbahce turco, el único de los 32 equipos que no ha puntuado todavía.

Consciente de que el empate es suficiente, y de acuerdo con ese talante más defensivo que su equipo exhibe esta temporada, Rexach podría prescindir esta tarde del manoseado tridente (que sí utilizó en la última jornada de Liga) para dar entrada al brasileño Geovanni en sustitución del argentino Saviola. Otro que podría volver al equipo, superada ya su lesión, es el francés Christanval, que ocuparía el centro de la defensa junto a De Boer.

Ha sido precisamente el francés quien, en ausencia del ex barcelonista Sony Anderson, lesionado, ha advertido de los que serán los principales peligros del Lyón: los delanteros Govou y Luyindula, dos delanteros rapidísimos y habilidosos que tienen en el físico su mejor virtud. "Creo que estamos físicamente bien para frenarlos, pero no podemos fiarnos ni un momento. Y, desde luego, tampoco salir a buscar el empate", señaló.

Más fácil todavía parece tenerlo el Deportivo, un equipo instalado en el optimismo merced a un estado de forma excepcional que le ha llevado a lo más alto en España y en Europa. Con el aliento de Riazor, los de Irureta parecen aún más invencibles, y por si no fuera suficiente cuentan con la inspiración de Valerón y el olfato de Tristán, que ha marcado cinco goles en los tres últimos partidos. Ni las ausencias (Molina, Naybet, Romero, Mauro Silva, Makaay y Manuel Pablo están lesionados) menguan el entusiasmo de los coruñeses. Lo demuestra el técnico Javier Irureta, siempre prudente, pero que ayer proclamó que el equipo "se encuentra con mucha moral e ilusión, al margen de las numerosas bajas, por cómo están saliendo las cosas".

Irureta, sin embargo, no se confía, porque sabe que el Lille, aun con la ausencia de su delantero centro, Bakari, debe ganar para mantener la esperanza de llegar a la segunda fase. "El hecho de que perdiesen contra Olympiakos hace que los franceses tengan que buscar la victoria como sea para conseguir tener opciones de clasificarse, y por eso digo que para nosotros el partido va a ser muy difícil", advirtió ayer.