Raúl está siempre
Tres goles del delantero entregan al Madrid ante el Zaragoza la primera alegría de la temporada
Al Madrid le costó digerir el tosco y difícil entramado que le preparó el rival. En la primera mitad, sólo pudo hacerlo a base de corazón. De excesivo corazón. Tanto que le sobraba precipitación. Con todo, las ganas de Figo por asomarse, por devolverle quizá a Esquerdinha las raciones de agobios que le dedicó en la ida, y, sobre todo, la licencia de Raúl para moverse a su antojo, alcanzaron para construir media docena de buenas acciones. Que no llegaban, eso sí, a inquietar demasiado al Zaragoza. Jugaban con fuego los maños, pero se les veía muy serenos en su papel. Y también, claro, sin posibilidad alguna. Porque el 0-0, aunque no lo pareciera por su actitud, les condenaba.
![<font size="2"><b>Raúl está siempre</font></b><p>En la imagen, el delantero celebra uno de los tres goles con los que el Real Madrid ha conseguido la Supercopa. (Foto: Gorka Lejarcegi).](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/4I77BNCSS5RES44VRWAS5UC7QA.jpg?auth=e6dd9550b0979325a3c39c18a25e4f7480b9e1ebeb34b35be73d81e43d01aa94&width=414)
En la imagen, el delantero celebra uno de los tres goles con los que el Real Madrid ha conseguido la Supercopa. (Foto: Gorka Lejarcegi).