Jesús Marchamalo: “Lectura obligatoria suena tan mal como felicidad obligatoria”
El periodista publica 'El libro de Miguel Delibes' al tiempo que ejerce de comisario en la exposición que la Biblioteca nacional dedica al escritor vallisoletano
En la divulgación de la lectura, Jesús Marchamalo (Madrid, 60 años) lo ha sido todo y en todos los medios: prensa, radio y televisión. Y lo sigue siendo. Autor de Los reinos de papel (Siruela), acaba de publicar El libro de Miguel Delibes. Vida y obra de un escritor (Destino) al tiempo que ejerce de comisario de la exposición que la Biblioteca Nacional dedica estos días al autor de El camino y que luego viajará a Valladolid.
¿Cuál fue el libro que le hizo lector? Más que un libro, fue una colección, la de Clásicos Juveniles de Bruguera. Unos libros que alternaban texto e ilustraciones. Ahí leí a Salgari, Dumas, Stevenson, primero viendo los dibujos y luego,y sólo a veces, el texto.
¿Y el último que le ha gustado? Me han gustado mucho A corazón abierto, de Elvira Lindo, y Amor intempestivo, de Rafa Reig. Tan valientes, tan conmovedores, tan llenos de humor.
¿De qué autor vivo lee todo lo que publica? De Landero, Longares, Pisón… Creo que de los tres tengo todos sus libros.
Díganos uno que no pudo terminar. Tengo muchos, y nunca me ha preocupado. Pero mi libro maldito de cabecera es Paradiso, de Lezama, un libro que hay que transitar con oxígenocomo si se ascendiera al Everest.
¿En qué piensa cuando oye la expresión “lectura obligatoria”? Pienso en ‘felicidad obligatoria’, ‘pasión obligatoria’, ‘amor obligatorio’… Los imperativos emparejan fatal con según qué cosas.
¿En qué han fallado las campañas de promoción de la lectura? Creo que la mayoríapecan de una excesiva solemnidad, y de un ciertotonopaternalista, tan disuasorio.
¿Qué clásico recomendaría a un rapero? A un rapero, algo moderno,claro. Tal vez Lope, ese soneto, Quien lo probó lo sabe.
Ha tratado a muchos escritores ilustres, ¿cuál le impresionó más? Sin duda,Juan Eduardo Zúñiga, de quien admiro su maestría literaria, sus palabras deslumbrantes, su ironía sutilísima.
¿Y cuál le decepcionó? Prefiero callar mis decepciones, siquiera por decoro. Pero no soy de grandes decepciones, tal vez porque tampoco soy de grandes expectativas.
¿Qué libro recomendaría para empezar a leer a Delibes? Hay muchas puertas para llegar a Delibes: Los santos inocentes, Cinco horas con Mario, El camino… A mí me gustó mucho El hereje.
¿Qué libro le envidia a la biblioteca personal de Delibes en su casa de Valladolid? Un ejemplar de las Poesías completas de Neruda en el que encontré, hojeándolo, 200 euros. Su hija Elisa, a quien se los entregué, vivió la decepción de que en mis sucesivas visitas no volviera a encontrar más.
Su haiku favorito hecho con tres títulos de libros es… "Las efímeras, / pequeñas mujeres rojas / entre visillos".
¿De qué película salió diciendo “me gustó más el libro”? De La fiesta del Chivo, por ejemplo.
¿Y viceversa? La naranja mecánica. Leí el libro después y no hacía más que recordar escenas de la película.
¿Qué autor o autora se merece una exposición en la Biblioteca Nacional? Este año, desde luego, Delibes. Y el que viene, sin duda, Laforet. Y me encantaría ver también ver allí también a Ferlosio.
¿Qué canción o pieza musical usaría como autorretrato? Me gusta mucho el tango de Gardel Por una cabeza, pero en la versión instrumental. No estoy seguro de quedar bien retratado en la letra.
¿Qué está socialmente sobrevalorado? El éxito en las redes sociales, esa complacencia enfermiza por el número de likes o retuits, ingenua y algo infantil.
¿A quién le daría el próximo Premio Cervantes? A Luis Mateo Díez. Sin duda quedaría estupendo en la colección de retratos de la Biblioteca Nacional con su porte cervantino. O a Luis Goytisolo.
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