Los rincones oscuros
Muchas de las reediciones más reveladoras de los últimos tiempos se han cocinado fuera de las grandes compañías
No se crean esa milonga de que toda la música grabada durante el siglo XX ya está disponible en ese universo-en-perpetua-expansión que es Internet. Ni mucho menos. Además, no basta con digitalizar añejos vinilos: se necesita información, fotos, contexto.
Hasta hace bien poco, las grandes compañías eran expertas en esas funciones. Ya no. Sus departamentos de catálogo, alias “marketing estratégico”, están prescindiendo de la investigación musicológica. Hoy, su obsesión es el volumen, literalmente: montar cajas abultadas de artistas establecidos, donde quepan libros, carteles, camisetas, lo que sea. And justice for all, de Metallica, que en 1988 era un CD sencillo, ahora incorpora maquetas, mezclas provisionales, directos en una deluxe edition, con veintisiete discos (¡27!) entre elepés, CD y DVD.
En realidad, si uno busca territorios insólitos, debe recurrir a esos aficionados que se empeñan en misiones imposibles. Como Miguel Menéndez, emigrado reciente a Bélgica que encontró los rastros de anteriores oleadas de españoles: infinidad de discos olvidados de rumba, canción andaluza y pop. Su investigación ha generado un deslumbrante estuche, con tres CD (72 canciones) y un libro de 64 páginas que reproduce portadas, recortes, fotos. El tipo de lanzamiento que, en tiempos más cultos, ganaba premios nacionales.
En varios de los discos seleccionados para esta lista, encontramos similares conexiones personales. La colección de Ivor Raymonde es obra de su hijo Simon, de los Cocteau Twins, que lo edita en su sello. El máster de Humitat relativa, de Remigi Palmero, estaba perdido desde 1979, hasta que un antiguo manager de Palmero se empeñó en rescatarlo. Parafraseando a Clemenceau, el legado musical es algo demasiado serio para dejarlo en manos de los disqueros.
1.- Remigi Palmero i Bon Matí. 'Humitat relativa' (La Casa Calba)
Finales de los setenta, inicios de los ochenta: algunos creadores valencianos –Pep Laguarda, Bustamante, Palmero- lanzaron unos discos tan bellos como orgullosamente localistas. Humitat relativa proponía un entendimiento entre la modernidad pop y las esencias valencianas. Fue un espejismo pero bien hermoso.
2.- Varios artistas. 'Soul vibration' (New Continent)
En Europa, toda grabación previa a 1963 pertenece al dominio público; ese periodo lo exploran exhaustivamente mil reediciones. Suelen ser discos pobres en documentación, con excepciones, como este triple español: orígenes del soul a partir de voces góspel y producciones de Motown, Atlantic, Stax, Chess.
3.- Haruomi Hosono. 'Paraiso' (Light in the Attic)
Eclipsado por otro de los fundadores de la Yellow Magic Orchestra, la deliciosa música de Haruomi Hosono en solitario nunca ha viajado fuera de Japón; solo ahora comienza a difundirse (y con limitaciones). En perezosa onda isleña, este LP de 1978 parece adelantarse a lo que luego llamaríamos exotica.
4.- Varios Artistas. 'Paradise: The Sound Of Ivor Raymonde' (Bella Union / PIAS)
Todavía se discute en España si Jimmy Page tocó en 'Black is black'. Sería más inteligente disfrutar con esta antología del productor del tema de Los Bravos, que también trabajó con Dusty Springfield, los Walker Brothers, Tom Jones o Bowie. Arreglador polivalente, su especialidad era el pop opulento.
5.- Varios artistas. 'Rumba Hispano Belga. Sonidos de la emigración española en Bélgica 1969-1989' (Rumba Hispano Belga)
Un asombroso trabajo sociológico-musical. Panorámica de los afanes de los españoles desplazados a Bélgica a partir de los sesenta, que generaron un circuito de bares y salas de fiesta, donde se vendían los discos (generalmente, autoediciones) de los grupos y solistas allí establecidos, tocando rumba y pop.
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