Ana Rosa Quintana cierra etapa y mira adelante

El programa de Ana Rosa acaba de cerrar su decimotercera temporada en Telecinco. "Había gente asustada con el número 13, pero a mí me da buena suerte", dice Ana Rosa Quintana. Y los datos le han dado la razón. El magazine matinal se ha despedido líder de audiencia con una media del 19% de cuota de pantalla y 543.000 espectadores, llegando en mayo y junio a lograr una distancia de 4,5 puntos respecto a Espejo público, su competencia en Antena 3. "Hasta me da pena irme ahora", bromea la presentadora entrevistada por EL PAÍS.

A pesar de llevar ya tiempo con la corona de reina de las mañanas, Quintana sigue asomándose cada día a las audiencias con interés. "Es como las notas en el colegio. Te dice si has acertado o no, si a la gente le ha gustado, y puedes rectificar". Sin embargo, confiesa no tener muy vigilada a la competencia. "No veo ni mi programa y mis grabaciones, como para ver la competencia...".

La periodista se marchó ayer de vacaciones con la satisfacción del deber cumplido y de haber cerrado otro curso en el que, asegura, fueron "referente informativo en los temas importantes que ha habido, desde elecciones a mociones de censura, incendios... El público nos elegía a nosotros cuando estábamos cuatro o cinco cadenas haciendo lo mismo".

Con el nuevo curso empezará también una nueva etapa para Ana Rosa Quintana que promete ser algo más tranquila después de decidir desligarse de Cuarzo Producciones, la compañía que fundó en el año 2000 y que, además de su propio programa, ha producido espacios tan variados como Cuarto milenio, Pequeños gigantes, Cintora a pie de calle o ¡Mira quién salta! En los próximos meses venderá las participaciones que aún conserva a Banijay Entertainmet, grupo internacional que desde 2008 es accionista mayoritario de la empresa. "Hay un contrato que se hizo para ocho años y acaba ahora. La opción era volver a firmar por otros ocho o cuatro años, y he decidido vender las pocas acciones que me quedan", confirma a EL PAÍS.

Entre los motivos que han llevado a la periodista a tomar esta decisión hay razones laborales y personales. "Al final, tengo un programa de cuatro horas diarias. Y también tengo dos niños que antes eran pequeños y ahora son preadolescentes y necesitan atención. Ser consejera delegada y presidir un consejo de una multinacional da mucho trabajo", añade la periodista. De momento, El programa de Ana Rosa, producido por Cuarzo en colaboración con Telecinco, no se verá afectado por este cambio. "Yo soy presentadora de Telecinco desde 2004. Y voy a seguir haciendo lo mismo, o si mi cadena me encarga otra cosa, otra cosa". ¿Eso significa que está abierta a otros proyectos fuera de la mañana? "Una sueña siempre con trabajar menos, pero cuando tienes un programa que te gusta y que tiene mucho éxito, es muy difícil desengancharte de él".

Aunque desde este lunes Joaquín Prat tome el relevo de Ana Rosa al frente de las mañanas de Telecinco, la presentadora seguirá en julio trabajando para preparar la temporada que viene y cerrando aspectos de otros proyectos de Cuarzo. "Ya tengo algunas ideas nuevas para el programa, pero no voy a decirlas para que no las copie la competencia", bromea la periodista. Lo que seguro que se mantendrá es la parte que más le apasiona, la política. "Pero la que más me emociona es la parte central del programa, en la que hablamos de temas de ciudadanos, gente que tiene problemas...", relata.