Póquer de damas

No son las aspirantes a actrices que convivían en el mismo piso en la deliciosa película de Gregory La Cava titulada Damas del teatro. Todo lo contrario. Son consagradísimas damas del cine y la televisión que este año confluyen en Broadway y que dejarán a los mitómanos tan emocionados como arruinados.

Bette Midler, Cate Blanchett, Glenn Close, Sally Field, Diane Lane, Laura Linney y Cynthia Nixon sacan pecho esta temporada en la meca del teatro. Algunas, como Blanchett, poniendo la guinda a su buena forma cinematográfica. Otras, como Midler o Linney, revalidando su prestigio ya algo extinguido en las pantallas, demostrando que la falta de papeles para mujeres maduras en Hollywood deja escapar talento de muchos quilates.

La apuesta más juguetona y estimulante de todas es la de La loba, de Lillian Hellman, en la que se irán alternando los papeles de madre perversa e hija cándida Cynthia Nixon, que en el teatro sí ha borrado la huella de su Miranda en Sexo en Nueva York, y la extraordinaria Laura Linney. La fecha de estreno, el 19 de abril, apunta ansias de Tony.

Bette Midler. Hello Dolly. ¿Qué más necesitas saber? es la publicidad del regreso de la cantante y actriz con lo que será casi una pieza de museo que se exhibirá también al final de la temporada. Una operación parecida a la que hace Glenn Close con el papel que ya le dio el máximo premio de Broadway, la Norma Desmond de Sunset Boulevard, prevista para reponerse en febrero. Cerrando el ciclo, uno de los papeles más recordados de esta actriz en el cine, la marquesa de Merteuil en Las amistades peligrosas, está ya siendo representado por Janet McTeer.

En un punto intermedio queda Cate Blanchett, que sigue la revisión contemporánea de los clásicos con resultados irregulares. Deslumbró con Un tranvía llamado deseo, pinchó con Las criadas. El desempate llega en enero con The Present, versión libre de Platonov, de Chéjov. Otro atractivo Chéjov para otra diva es El jardín de los cerezos, con Diane Lane, si bien las críticas han sido demoledoras. Y aunque es la obra maldita de Tennessee Williams en lo que a premios Tony se refiere, El zoo de cristal vuelve a escena transcurridos apenas dos años de la última versión (la que supuso el debut de Zachary Quinto) con un animal delicado: Sally Field. ¿Alguien da más en este póquer de damas?