Ajuste de cuentas para 2014
TVE aumentará el presupuesto de contenidos y reducirá la partida destinada a personal Los Juegos Olímpicos de invierno costarán 30 millones de euros
La austeridad —y los errores de estrategia a la hora de renovar la parrilla— han llevado a la televisión pública a marcar este año sus niveles mínimos de audiencia. Para el próximo, la cadena quiere dar un giro a esta política, basada en abaratar la oferta y guardarse en la recámara contenidos de gran tirón en el público. Prevé aumentar el presupuesto para la compra de programas, pero tendrá que hacer frente a un gasto extraordinario: los 30 millones de euros que desembolsará por los Juegos Olímpicos que se celebrarán en Sochi (Rusia). Una inversión que a la hora de la verdad tendrá una minúscula repercusión en la audiencia. Con todo, los Juegos de invierno cuestan la mitad que los de verano. TVE pagó 70 millones por Londres 2012.
El aumento de los recursos para la compra de contenidos (de los 210 millones presupuestados en 2013 se pasará a 250 en 2014) se hará a costa de la partida de personal, que menguará en casi 30 millones, según prevé la corporación en el anteproyecto de presupuesto para 2014, que fue presentado la semana pasada por su presidente, Leopoldo González-Echenique, al Consejo de Administración, donde obtuvo el respaldo de los consejeros del PP y CiU y el voto en contra de los representantes del PSOE e IU.
RTVE calcula que ingresará 950 millones de euros, prácticamente lo mismo que había previsto para este ejercicio (aunque si nadie lo remedia le faltarán alrededor de 80 millones para llegar a esa cifra). Después del hachazo que el Gobierno le ha asestado en los dos últimos años (250 millones menos de subvención directa), para 2014 confía en recibir por la compensación del servicio público alrededor de 300, la misma cantidad que este curso. Y también espera que las cadenas privadas y las telecos se recuperen. Su buena marcha repercutirá en las arcas de RTVE, ya que ambos sectores están obligados a destinar un porcentaje de sus ingresos a la televisión pública.
A cuenta de las cadenas privadas, Prado del Rey estima que recibirá unos 55 millones de euros, mientras que las telecos desembolsarán alrededor de 115. Además, RTVE tiene pendiente de cobro 90 millones de otros años, ya que las telecos hicieron mal las cuentas en las liquidaciones y la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones les ha obligado a pagos adicionales. Una bufanda inesperada que no se repetirá otro año. Además, está la tasa que cobra el Gobierno a todo tipo de operadores por el uso del espacio radioléctrico, que suponen otros 330 millones.
Este será el primer presupuesto sin que planee la espada de Damocles sobre el modelo de financiación. La Comisión Europea lo ha avalado al retirar la denuncia contra España y dar el visto bueno a la tasa de las telecos (el 0,9% de sus ingresos anuales).
La crisis ha provocado que estas aportaciones mengüen. Pero lo que en verdad está estrangulando las cuentas de RTVE (el año pasado arrojó unas pérdidas de más de 100 millones de euros) es el tremendo recorte de la aportación directa del Estado. En solo dos años la poda ha sido de casi el 50%, mientras que en la mayoría de la Administración y las empresas públicas ha rondado el 20%. “Hay un ensañamiento del Gobierno contra RTVE”, dice la oposición.
El portavoz de los socialistas en la comisión de control parlamentario, Juan Luis Gordo, asegura que el Ejecutivo intenta matar a la televisión pública de “inanición”. “El PP piensa que España no necesita el servicio público de RTVE e intenta cargársela. Ni el Gobierno, ni el PP, ni el presidente de la Corporación, Leopoldo González-Echenique, tienen un proyecto de futuro sostenible para RTVE ni para sus trabajadores”, ha dicho Gordo.
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