La dura pelea de las mañanas

Ana Rosa Quintana y Susanna Griso permanecen al frente de la programación matinal de las grandes cadenas privadas, una franja en la que compiten desde hace varios años. El lunes 2 de septiembre, El programa de Ana Rosa iniciaba su décima temporada, mientras que Espejo público hacía lo propio en su octava cita con los espectadores. Según los datos de Barlovento Comunicación, después de dos semanas de emisión el programa liderado por Quintana se mantiene, al igual que en los nueve años anteriores, como la opción preferida por los espectadores y obtiene una media de 14,3% de cuota de pantalla. Ahora bien, las distancias se han reducido: Espejo público acumula un 14,2% de cuota. En 2012, tras las 10 primeras entregas de ambos programas, la distancia se estiraba hasta las ocho décimas (16,3% para Quintana y 15,5% para Griso). Mientras, Las mañanas de La 1 viaja a un ritmo más lento (7,1%).

A pesar de las buenas cifras, Susanna Griso prefiere ser cauta: “Comenzar con tan buenos datos es un estímulo, pero la carrera arranca cuando empiezan colegios e institutos. Ahora es cuando las audiencias comienzan a asentarse y Espejo público recupera su público objetivo”. Ana Rosa Quintana abunda en esta dirección: “La primera quincena es un ensayo, porque hasta que empiezan los colegios el mando es de los niños. Sin embargo, estamos muy contentos: arrancamos por debajo en el share, sí, y eso que en el primer programa teníamos cuatro exclusivas, pero hemos crecido rápidamente”. En cualquier caso, después de tantos años de liderazgo, Quintana resta  importancia a la “competición”: “Yo siempre quiero ganar, por supuesto, pero después de nueve años me gusta prestar más atención al contenido que a los datos de audiencia. Además, si perdemos, solo sería un 9 a 1”, asegura.

Espejo público ha emprendido su temporada con nueva imagen, con un plató renovado y con incorporaciones como la de Nacho Abad, arrebatado a El programa de Ana Rosa, que “se ha acoplado perfectamente”, según Griso. “Dije que era un ‘elemento desestabilizador’ y lo sigo manteniendo, enriquece el debate porque aporta un punto de vista distinto”.

En El programa de Ana Rosa los cambios han sido menores: “La temporada pasada fue magnífica, de modo que no hemos propuesto cambios radicales. Ahora queremos abordar muchos temas sociales, estar al lado de la gente que lo está pasando mal, vamos a estar pendientes de asuntos como el paro, los desahucios… Somos como un periódico, el programa vive de la actualidad”. También Espejo público mantiene su intención de permanecer unido al día a día: “Siempre hemos sido un programa informativo hecho por la redacción de informativos de Antena 3”.