Resines se mete a cura

Un constructor tramposo, moroso y juerguista se hace pasar por su hermano gemelo, sacerdote, para librarse de la policía y los acreedores. Podría tratarse del enésimo caso de corrupción en España, pero es el argumento de He visto un ángel, la nueva serie de Telecinco dirigida por Fernando Colomo y protagonizada por Antonio Resines. María Barranco, Julieta Serrano y Miguel Rellán darán vida a algunos de los vecinos de La Redención, barrio al que llega el falso párroco. Este jueves, los actores han hecho un parón en el rodaje del primer episodio y abrieron las puertas del plató para desvelar algunos detalles de la trama. Cuentan que, tal y como está el patio, buscar inspiración no ha sido difícil.

Cuando Ángel, sacerdote solidario y comprometido con los problemas de los demás, tiene un accidente de tráfico, su hermano gemelo Daniel ve el cielo abierto y decide suplantar su identidad para huir de las deudas acumuladas como constructor. Resines interpreta a ambos, “al responsable y al jeta”, y asegura que está siendo un reto meterse en la piel de dos personajes tan distintos. Esta serie supone su regreso a la televisión tras el fracaso de Cheers. Aunque desconoce la fecha exacta del estreno, estima que será en septiembre. Confía en “la buena mano” de Fernando Colomo y en que el argumento enganche al espectador. “La trama girará en torno al equívoco y los esfuerzos por no ser descubierto. Eso dará lugar a situaciones muy divertidas. Daniel ni conoce a la gente ni tiene idea de religión o de liturgia”, afirma el actor.

Colomo dio un sí rotundo al proyecto cuando se enteró de quién protagonizaría la serie. “Resines para mí es como un hermano”, asevera el director. Además, destaca la capacidad interpretativa del resto del elenco. “Uno así trabaja hasta relajado”, añade. Con esta comedia pretende hacer una crítica no tanto a la Iglesia como a una sociedad “en la que hay más de un personaje como el protagonista”. María Barranco, que se pondrá en la piel de Cuca, la esposa de un concejal de Urbanismo de dudosa moralidad, coincide con él. La actriz está “encantada” con su papel de “mala”, de nueva rica a la que le gusta controlar todo lo que ocurre en el barrio y que, con toques de humor, encarna al “vivo retrato de la corrupción”.

Julieta Serrano interpreta a Rosario, la madre de los gemelos, que “también tiene una doble moral y no dudará en pasar por alto sus valores religiosos para descubrir qué se esconde tras el comportamiento extraño de su hijo”. Miguel Rellán, quien da vida a un obispo “que las pasará canutas cuando el protagonista lo convierta en cómplice al contarle su secreto en confesión”, completa el reparto. La mayoría resalta la facilidad con la que el espectador se sentirá identificado con el falso cura y sus peripecias para salvar el cuello. Como dice Colomo, “los granujas caen simpáticos”.