Del yo zapeo al yo tuiteo

¿Qué ponen en la televisión? ¿Qué tal es la serie que acaban de estrenar? La contestación a estas preguntas ya no tiene que esperar al día siguiente. La respuesta la tienen miles de personas en este momento: solo hay que entrar en Twitter. Ha surgido una nueva forma de ver la televisión. Pongamos un par de ejemplos. Noche del lunes 30 de enero. Varios programas luchan por hacerse con el favor del público. En Twitter, los dos principales trending topics (los temas más comentados del momento) son #quienquierecasarseconmihijo y #Crematorio. Un día antes, el regreso de Salvados recuperaba la actividad favorita de los tuiteros españoles en la noche de los domingos: comentar el programa de La Sexta en mensajes de hasta 140 caracteres.

El móvil, el iPhone o la tableta han sustituido al mando a distancia en la mano de los televidentes. Emisiones como Gran Hermano, Tu cara me suena o el festival de Eurovisión ya no se ven en solitario: se comentan en vivo con miles de tuiteros. “Es un chat gigante en abierto”, explica Eduardo Prádanos Grijalvo, responsable de comunicación de Play Televisión y especialista en transmedia y televisión social. “Dejamos el viejo consumo pasivo de la televisión para pasar a ser activo”.

Sin embargo, como señala Prádanos Grijalvo, en España “hay muy pocas iniciativas que expriman el verdadero potencial de las redes sociales”. Todavía el público va un paso por delante. Fue algo espontáneo lo que hace algo más de un año llevó a miles de personas a comentar el estreno de la miniserie Felipe y Letizia. El efecto llamada y los comentarios jocosos sobre el programa hicieron que muchos tuiteros encendieran la televisión para poder participar en el debate. Nadie quiere quedarse fuera de la conversación en Twitter, red que en diciembre de 2011 contaba con 4,3 millones de usuarios en España, según datos de Comscore.

Los propios presentadores de los programas están empezando a participar en este gran ágora. Raquel Sánchez Silva, Eva Hache, Maxim Huerta o Andreu Buenafuente frecuentan esta red, en la que se encuentran más cerca y más expuestos que nunca a sus seguidores. Jordi Évole, director de Salvados, es uno de ellos. “Mi cuenta la abrió en el 2008 el responsable de Internet de El Terrat y al principio la gestionaba él. Cuando me enseñó a usarla yo era muy escéptico, pero ahora casi se ha convertido en una adicción”, cuenta Évole.

Medidor de popularidad

Los trending topics dan una idea de por dónde se mueve la conversación en Twitter y sirven como indicador de lo que funciona y lo que no entre el público. Como explica Ricardo Vaca, presidente de la consultora audiovisual Barlovento Comunicación, “las redes sociales potencian el consumo y visionado de televisión, retroalimentan el consumo televisivo, además de aumentar la popularidad y prestigio de un programa”. Herramientas como Twitter pueden ejercer una influencia en la audiencia de un programa “tanto a favor como en contra”, asegura Ricardo Vaca, poniendo como ejemplo el caso del estreno de Con el culo al aire y la buena acogida en redes sociales de su debut en Antena 3.

Sin embargo, una gran repercusión en Twitter no tiene por qué significar un éxito de audiencia. La última edición de Operación Triunfo llevó a miles de personas a comentar (y criticar) a la presentadora Pilar Rubio, los profesores y los triunfitos, consiguiendo una gran repercusión en redes sociales, pero fue retirado de la parrilla cuando llevaba poco más de un mes de emisión por los bajos índices de audiencia. En esta idea insiste Évole. “No hay una relación clara entre el éxito del programa en Twitter y la audiencia que tenga. Pero lo que sí consigues es tener un espectador activo y una gran información cualitativa sobre el programa. Antes, podíamos recibir 30 SMS de amigos comentando qué les había parecido la emisión. Ahora es como ver el programa con otras 100.000 personas pudiendo conocer sus impresiones y reacciones al momento. Eso es todo un lujo para nosotros”.

Un gran impacto en Twitter no siempre se traduce en un éxito de audiencia

Si hay ejemplo de programa de televisión con éxito en redes sociales en España, ese es Salvados. En esta temporada, antes de cada emisión proponen la etiqueta de la semana desde su cuenta oficial, hashtag que también anuncia Évole a sus casi 500.000 seguidores. Desde sus perfiles de Twitter adelantan el tema del reportaje para crear expectación. Durante la emisión del programa recuerdan varias veces en pantalla la etiqueta. Una audiencia cómplice e interesada por los temas de actualidad que recoge el programa hace el resto: trending topic nacional y, muchas veces, mundial. “Empezamos a usar Twitter de forma muy intuitiva”, explica Juan Luis de Paolis, la persona detrás del usuario @salvadostv. “De hecho, la primera vez que decidimos lanzar un hashtag simplemente nos llamamos Jordi [Évole] y yo media hora antes del programa y nos pusimos de acuerdo”. Además de servir para medir las reacciones de los espectadores en directo, ahora piden propuestas de temas y de entrevistados. “Tenemos a dos guionistas siguiendo estas sugerencias, están llegando muchísimas”. De hecho, como cuenta De Paolis, el programa han emitido esta semana trataba uno de los temas más demandados por la audiencia, cuánto cuesta la monarquía.

¿Hacia dónde camina la relación entre televisión y redes sociales? Eduardo Prádanos Grijalvo apuesta por el desarrollo de la “segunda pantalla” y por métodos de medición de audiencia que demuestren a las cadenas lo que les aporta estar en los medios sociales. “En unos años, ya no existirá el término ‘televisión social’ y será simplemente eso, ‘televisión”, augura.