Las obras del parque de los Tres Turons comenzarán en 2020

Los trabajos previos para materializar el parque de los Tres Turons, en los distritos de Horta-Guinardó y Gràcia de Barcelona, avanzan. Pero muy lentamente. El proyecto de unión de los turons de la Rovira, el Carmel y la Creueta del Coll para convertirlos en un “pulmón verde” de 123 hectáreas data de los años 50 y la modificación del Plan General Metropolitano para hacerlo realidad es de 2010.

Y no ha sido hasta esta semana que el Ayuntamiento ha elegido las tres propuestas del concurso que serán el punto de partida para la estructura de caminos para comunicar las tres colinas, el perímetro del futuro parque y los entornos de las canteras del barrio de Can Baró. “Estamos en la fase cero”, reconoció ayer la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz.

Pero la edil puso fecha —finales de 2020— a una de las primeras intervenciones que será necesario desarrollar: construir los edificios que albergarán a las 295 familias que viven en casitas en las cotas más altas del futuro parque. Finalmente, los nuevos edificios se ubicarán en Can Baró —en el solar de los antiguos Talleres Muñoz, en la esquina entre la avenida Verge de Montserrat y la calle de Francesc Alegre— y por debajo del polideportivo de la calle de Tenerife que los vecinos exigían mantener.

Sanz aseguró que el parque de los Tres Turons será uno de los grandes proyectos del próximo mandato: “Pasará de ser una asignatura pendiente a un proyecto de primer orden”, manifestó. Al concurso de ideas que se ha resuelto esta semana se presentaron 17 equipos y 9 pasaron a la segunda fase. El jurado, con representantes municipales, de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona, el Colegio de Arquitectos y el de Ambientólogos, ha elegido los tres ganadores.

Unas propuestas que servirán de hoja de ruta para redactar los proyectos definitivos, siempre con la participación de los vecinos del entorno. “El camino es la naturaleza” ordena y define la estructura básica de los caminos y anillos que rodearán y conectarán las tres colinas. Un proyecto que también vela por proteger la biodiversidad. El proyecto “Orden y aventura” se encarga de las intervenciones en el lado montaña del parque para mejorar la continuidad y comunicaciones entre los barrios y el futuro parque. El tercer proyecto ganador “Co-habitar” se encarga de poner en valor los entornos de las canteras de Can Baró y de que tengan una buena relación con el espacio público y las viviendas de realojo.