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Las asociaciones vecinales exigen al Ayuntamiento que no se derribe el Calderón en periodo lectivo

Calculan que las obras afectarían a los 3.200 alumnos de cuatro centros públicos de la zona

Miguel Ángel Medina
El estadio Vicente Calderón y, detrás, la fábrica de Mahou (ya derribada), en una imagen de archivo.
El estadio Vicente Calderón y, detrás, la fábrica de Mahou (ya derribada), en una imagen de archivo.ALBERTO FERRERAS
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Las asociaciones vecinales y de padres y madres del entorno del Vicente Calderón piden al Ayuntamiento que no se derribe el estadio durante el periodo lectivo, ya que consideran que las obras afectarían a los 3.200 alumnos de los cuatro centros públicos educativos de la zona. Por ello, en un comunicado que harán público este martes, reclaman al Área de Desarrollo Urbano Sostenible (DUS) que lleve a cabo los trabajos en periodo no lectivo, tal y como, afirman, se comprometió con ellos el delegado del departamento, José Manuel Calvo. Una portavoz de DUS explica que los propietarios todavía no han pedido licencia de demolición, y que el Consistorio velará para que los trabajos se llevarán a cabo "cuando genere las menores molestias a los vecinos y a los colegios".

Según los vecinos, el proyecto de urbanización contempla dos fases: la primera, de noviembre del 2018 a marzo del 2019; y la segunda, de septiembre del 2019 a diciembre del 2019. "Eso significa que los tiempos elegidos para la demolición del Vicente Calderón transcurren, casi en su totalidad, en periodo lectivo, dejando el periodo vacacional más largo (el estival) libre de obras de demolición", critican las asociaciones. El Ayuntamiento responde: "Nosotros intenvendremos en la medida de lo posible, porque el estadio es privado, para que las obras de demolición generen las menores molestias a los ciudadanos". 

En opinión de padres y vecinos, los ruidos por la demolición afectarán a los centros escolares cercanos -CEIP Tomás Bretón, IES Gran Capitán, CEIP Joaquín Costa y la Escuela Infantil El Alba- así como al centro de salud Paseo Imperial. Las Asociaciones de Madres y Padres (AMPAS) de dichos centros educativos cuentan con el apoyo de la FAPA Francisco Giner de los Ríos, la Asociación de Vecinos Pasillo Verde-Imperial y la Federación de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM).

Las asociaciones firmantes están convencidas "de que durante el periodo lectivo se superarán los niveles sonoros reglados en la Ordenanza de Protección contra la Contaminación Acústica y Térmica, que limita los decibelios máximos admisibles a 35 en aulas, y a 30 en Despachos, salas de estudio o lectura". Además, "la emisión de partículas en suspensión durante la demolición del estadio estará por encima de los límites marcados por la legislación, al no encontrar en el Proyecto medida específica alguna relativa al cuidado de este aspecto".

Compromiso público

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La FRAVM y demás asociaciones hacen hincapié en que este fue el compromiso público adquirido con los vecinos por parte del concejal de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo: "Así lo expresó el concejal en varias ocasiones en diferentes actos públicos, como el del pasado 26 de febrero", señalan. Entonces, según recogió Europa Press, Calvo indicó que la exigencia municipal, trasladada al club, es que "las obras se hagan en verano por las afecciones al tráfico y para minimizar las molestias a los vecinos". "Si la licencia no estuviera tramitada antes de este verano, que yo creo que sí es viable en plazos, tendremos que esperar al verano de 2019", dijo.

Además, los vecinos piden establecer un calendario para el desvío de tráfico de la M-30, así como habilitar barreras acústicas para minimizar el impacto sonoro resultante de aproximar el tráfico de vehículos a los centros escolares y viviendas afectadas por el desvío. También requieren diseñar un plan específico de salud ambiental durante la ejecución del proyecto de urbanización, involucrando a los profesionales municipales de Madrid Salud para garantizar la salud de la población de la zona.

Otra de sus peticiones es un plan de participación vecinal para el diseño de las nuevas zonas verdes del ámbito de actuación urbanística, con especial atención al nuevo parque que se ubicará a la entrada del CEIP Tomás Bretón y al área del parque de Madrid Río destinada a recordar el estadio Vicente Calderón.

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Sobre la firma

Miguel Ángel Medina
Escribe sobre medio ambiente, movilidad -es un apasionado de la bicicleta-, consumo y urbanismo. Licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense, ha ganado los premios Pobre el que no cambia su mirada y Semana Española de la Movilidad Sostenible. Ha publicado el libro ‘Madrid, preguntas y respuestas. 75 historias para descubrir la capital’.

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