Maragall le ve “corto recorrido” al recurso contra las delegaciones

El consejero de Exteriores, Ernest Maragall, intentó ayer quitar hierro a la decisión del Gobierno central de recurrir ante el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) la reapertura de las delegaciones de la Generalitat en el exterior, cerradas por la aplicación del artículo 155. Maragall acudió ayer al acto de reapertura de la Oficina de representación del Gobierno catalán en Londres, situada en el numero 17 de Fleet Street, la legendaria calle donde se concentraban hasta hace unas décadas los principales diarios ingleses.

“No nos sorprende el recurso. Se trata de una cuestión de procedimiento ante un tribunal contencioso administrativo a la que responderemos en su debido momento con nuestras razones y argumentos. Ya veremos en qué acaba todo esto”, dijo Maragall. El consejero anunció que seguirá adelante el proceso de reapertura de delegaciones y cree que el recurso del Gobierno español tendrá un recorrido muy corto. “La presencia de Cataluña no necesita pedir permiso. Lo hacemos”, dijo.

Maragall confirmó que el Diplocat, el organismo que la Generalitat anterior utilizó para promover en el exterior la campaña por la independencia de Cataluña, “estara de nuevo funcionando a pleno rendimiento y con todo su personal a finales de año”.

La delegacion en Londres, explicó Maragall, cumplirá tres objetivos: “representar, estar presentes e influir”. El objetivo, dijo, es representar a las instituciones catalanas y poder explicar “la irracional situación en el ámbito de la libertad que existe en nuestro país, así como denunciar que 17 personas siguen encarceladas injustamente”. Quiere además el Gobierno catalán que las autoridades británicas escuchen sus argumentos, “que nos conozcan y que podamos compartir reflexiones”.

El consejero se mostró convencido de que, desde esta plaza, la Generalitat podrá hacer oír su voz en asuntos que afectan a todos, como el Brexit. También anunció la intención de seguir muy de cerca y participar en todo aquello que afecte a Irlanda del Norte o a Escocia en el proceso de salida de Reino Unido de la Unión Europea.