Barcelona vive su semana grande del arte contemporáneo

“Uno de los grandes retos de la comunidad artística catalana es abrirse al circuito extranjero, atrayendo coleccionistas e instituciones que nos ayuden a exportar cada vez más nuestros artistas. Esto se consigue sólo organizando un conjunto de eventos contundentes, que motiven el desplazamiento del público profesional y aficionado. Es el caso de dos grupos de coleccionistas rusos y franceses que se han sumado de forma espontánea a nuestro programa de coleccionistas invitados”. Lo afirma Joaquim Diez-Cascón, fundador y director de la feria de arte contemporáneo Swab, que celebrará su 11ª edición, entre el jueves 27 y el domingo 30, con 60 galerías, el 67% de las cuales son extranjeras y proceden de 19 países.

Es de la misma opinión también Àlex Nogueras, presidente de la Asociación Art Barcelona, impulsora del Barcelona Gallery Weekend (BGW) que crece con 28 galerías y la incorporación de las Fábricas de creación. “Ambos eventos, el Weekend y Swab, aunque muy intensos por lo que se refiere a oferta, son de pequeños formatos, de modo que no hay competencia, sino que se complementan. No hemos organizado actividades conjuntas, pero nos hemos coordinado para el público pueda aprovechar la mayoría de actividades posible”, indica Nogueras. Sin embargo, hay galerías e instituciones que participan en los dos eventos como el bufete de abogados Cuatrecasas, que ofrece sus conocimientos en materia legal y fiscal para facilitar las adquisiciones.

Además de la voluntad de internacionalizar los artistas y las galerías catalanas, ambas iniciativas se caracterizan por elaborar programas dirigidos tanto a profesionales y coleccionistas de destacado poder adquisitivo como al público general y los compradores a sus primeros escarceos con el mundo del arte. “Se trata de influir en la mentalidad para que comprar arte se convierta en un hábito. Hay obras de arte de precio equivalente a un objeto de diseño o a una prenda de ropa de marca”, asegura Susanna Corchia, que repite como directora del Gallery Weekend, tras el éxito del formato del año pasado.

Para abrir las galerías a los coleccionistas novatos, Corchia ha concebido el programa Artevete, que aspira a tener una continuidad a lo largo de todo el año y propone un recorrido por galerías que en su oferta destacan obras que rondan los 2.500 euros. “Revitalizar un mercado que ya ha empezado su renacimiento, favorecer la creación de una comunidad capaz de potenciar el tejido cultural barcelonés e incrementar la implicación de los privados, son algunos de nuestros objetivos principales”, indica Corchia, destacando el apoyo de las instituciones públicas que este año alcanza el 66%, mientras que las aportaciones privadas se sitúan en el 7% (el 27% restante procede de recursos propios). Estos apoyos han permitido al BGW mantenerse completamente gratuito e incluso producir obras creadas especialmente para salir del límite de las galerías y activar lugares públicos y privados poco conocidos, pese a su gran interés. “El programa denominado Composiciones invita a explorar la ciudad con una mirada nueva a través de cinco proyectos, que evidencian tanto los rasgos arquitectónicos como los aspectos conceptuales e históricos, que caracterizan las localizaciones elegidas”, explica Gloria Picazo, una de las comisarias.

Una estrategia análoga se detecta en Swab, que desde sus inicios ha potenciado un perfil de galerías emergentes de alta calidad y precios asequibles. Además de invitar a tres galerías con menos de dos años de trayectoria que nunca han participado a una feria internacional, Swab otorga un especial protagonismo a la creación joven en las diversas disciplinas con programas comisariados como Ephemeral con artistas en residencia en las Fábricas de creación y Swab Performance en colaboración con la Diputación, que se propone visibilizar las prácticas performativas desbordando los días de la feria y manteniendo a lo largo del año un programa que tocará un gran numero de localidades de Cataluña.