Cárceles modernas para los presos independentistas

Los políticos presos catalanes llegarán en las próximas horas a Cataluña y serán recluidos en dos prisiones: Puig de les Basses, en Figueres, donde irán la expresidenta del Parlament, Carme Forcadell, y la exconsejera de Trabajo, Dolors Bassa; y la de Lledoners, en Sant Joan de Vilatorrada, que encerrará a Oriol Junqueras, exvicepresidente de la Generalitat, los exconsejeros Jordi Turull (presidencia), Josep Rull (Territorio y Sostenibilidad), Joaquim Forn (Interior), Raül Romeva (Exteriores), y los presidentes de Òmnium, Jordi Cuixart, y de la ANC, Jordi Sànchez.

Lledoners, un centro de participación y convivencia

La prisión de Sant Joan de Vilatorrada es relativamente nueva, se inauguró en 2008. Tiene ocho módulos de vida ordinaria, con 512 celdas, y en la actualidad está a un 73% de ocupación (684 presos), lo que facilita siempre el funcionamiento en prisión.

Lledoners tiene la particularidad de que los presos pueden participar en la organización de las normas de convivencia, a través de comisiones que se escogen con votaciones entre los internos. Sus representantes formulan propuestas, y las que son viables salen adelante con la participación de educadores o psicólogos del centro. También pueden autogestionar actividades como iniciativas solidarias, mediación de conflicto o actividades deportivas. El sistema se aplica desde 2012 y está previsto que se expanda al resto de centros penitenciarios, según el Departamento de Justicia.

Desde 2016, la prisión la dirige la psicóloga Paula Montero. Antes fue subdirectora general de programas de rehabilitación y sanidad (2007-2015).

Puig de les Basses, una de las prisiones más nuevas

La prisión de Puig de les Basses, en Figueres, es una de las más nuevas de Cataluña, después de la de Mas d’Enric, en Tarragona. El centro tiene nueve módulos de vida ordinaria y 620 celdas. Es una prisión principalmente para hombres, pero tiene un reducido módulo para mujeres, con 35 internas.

El centro penitenciario se abrió con tres años de retraso, después de que la Generalitat en plena crisis retrasase la apertura de algunos centros penitenciarios para evitar más gastos. Se acabó en 2011, pero Artur Mas no la inauguró hasta 2014. En la actualidad, hay 734 internos (80% de su capacidad).

Desde abril, la dirige Francisco Lisa, que sustituyó a Fernando Velasco. Profesor y licenciado en Filosofía, Lisa estuvo antes al frente del centro abierto de Girona.

Visitas

El régimen de visitas en ambas prisiones será similar al que los presos tenían en Madrid. Las comunicaciones por cristal o locutorio, las familias y amigos tendrán 40 minutos semanales como hasta ahora, que podrán dividir en dos, si prefieren, los fines de semana. Además, los que tienen hijos menores de 10 años (Cuixart, Junqueras y Rull), podrán tener una comunicación mensual de convivencia de 90 minutos (hasta ahora hacían una de 3 horas al trimestre).