Aumentan un 38% las muertes de trabajadores en accidentes de tráfico
Las mujeres sufren el 60% de los siniestros registrados desde 2010 "por su doble presentismo laboral"
Un informe de UGT alerta de que en 2016 murieron un 38% más de trabajadores en accidentes de tráfico durante su jornada laboral en la Comunidad de Madrid. De los 80 profesionales que perdieron la vida, 22 perecieron en la carretera, seis más que el año anterior. Entre ellos, transportistas, profesionales que se desplazan de forma continuada (en misión) y empleados que solo toman el coche para cubrir el trayecto que separa su casa del trabajo (in itinere). Las mujeres son las peor paradas, ya que protagonizan el 60% de los 100.979 siniestros acontecidos desde 2010. UGT cree que ocurre porque trabajan en casa y fuera, por lo que solicitan flexibilizar horarios.
Cada día en la región se producen millones de desplazamientos, muchos originados por motivos laborales. Hace unos días se celebraba la Semana Europea de la Movilidad, que intenta concienciar sobre el uso del transporte público. Susana Huertas, secretaria de Salud Laboral de UGT-Madrid, demanda su refuerzo. De esa manera, sostiene, se evitarían muchos accidentes de tráfico de trabajadores en jornada laboral. En su opinión, que los profesionales tengan que hacer uso de su propio vehículo no ayuda a disminuir la siniestralidad. Sin embargo, en muchas ocasiones no les queda otro remedio: sus puestos de trabajo están situados en polígonos industriales o fuera de la ciudad, donde no llegan los autobuses ni el metro.
El documeto elaborado por UGT muestra su preocupación por el ascenso de los accidentes de tráfico durante la jornada laboral. Alerta del número de trabajadores que pierden la vida cada año en la carretera. Entre 2010 y 2016 en Madrid se registraron 594.304 accidentes laborales, de los que 100.979 (el 17%) fueron en carretera. El 60% de estos siniestros fueron protagonizados por mujeres. “No es que conduzcan peor, vayan retocándose o hablando por el móvil”, afirman desde UGT. Huertas indica que el motivo es su doble presentismo laboral. “La mujer trabaja en casa y en la empresa. Es la que se dedica normalmente a llevar los niños al colegio. Luego tiene que trasladarse a su trabajo con prisas para no perder el empleo. Todo sería diferente si hubiese una mayor flexibilidad en el horario laboral para conciliar vida laboral y familiar”.
Planes de movilidad
“Las empresas necesitan planes de movilidad y prevención en seguridad vial. Hay un concepto erróneo por el que si son muertes que se producen en la carretera se tiende a pensar que no se podía evitar”, subraya Huertas. En su opinión, a los trabajadores les falta formación e información para evitar accidentes. En su estudio, UGT alerta de que estos accidentes de tráfico no se califican como accidentes de trabajo, a pesar de tener un origen laboral. La reivindicación de este sindicato es que se traten como tales para que los empleados no vean reducidos sus derechos.
“Normalmente, los siniestros in itinere se contabilizan aparte. Se entiende que, al suceder en la carretera, no se podían evitar. Sin embargo, hay factores psicosociales que son responsabilidad de la empresa. Riesgos asociados al trabajo, como el cansancio o el estrés por no llegar a tiempo”, señala Huertas. En su opinión, este es un síntoma de precariedad laboral que se vive en los últimos años. Y destaca: “Llama la atención que los accidentes in itinere hayan seguido aumentando en los años de crisis, con una menor actividad económica”.
El año con mayor siniestralidad laboral fue 2010, con 103.757 accidentes, de los que 15.798 correspondieron a los llamados in itinere. La cifra comenzó a descender gradualmente, pero la tendencia se rompió en 2015 y 2016. Del total de accidentes laborales registrados en estos siete años, solo 562 fueron mortales. De ellos, 161 fueron trabajadores que perdieron la vida en accidentes de tráfico: 109 in itinere y el resto, 52, en misión.
Los accidentes de tráfico mortales durante el horario laboral comenzaron a contabilizarse en 2010. Ese año murieron 26 trabajadores al volante, 17 de ellos in itinere. Sin embargo, el peor año fue 2011, cuando las carreteras madrileñas sesgaron la vida de 30 profesionales, 20 in itinere. Las cifras comenzaron a descender desde entonces, pero en 2016 han vuelto a repuntar: de los 80 fallecidos en accidentes laborales, 22 perecieron en accidentes de tráfico, 15 in itinere y siete en misión. Entre enero y agosto de este año, se han contabilizado 34 accidentes laborales mortales, con diez fallecidos en accidentes de tráfico (siete in itinere y tres en misión).
