El telón del Liceo no se repondrá hasta finalizar la revisión del sistema

El telón rojo del Liceo no volverá a subir y bajar hasta que concluya la revisión de todos los mecanismos del escenario, según manifestó el director general, Roger Guasch. La barra de la que suspendía el telón -unos 1.500 kilos de peso entre la tela y los anclajes- se precipitó contra el suelo del escenario el 13 de enero, al término del ensayo general de la ópera Werther y mientras algunos trabajadores estaban todavía en la escena. "No alcanzó a nadie y no hubo que lamentar daños personales por eso hablamos de incidente y no de accidente", insistía Guasch que afirmó que la revisión de todos los sistemas de sujeción de los elementos situados sobre el escenario se han ampliado y se están llevando a cabo por la ingeniería que los diseñó y colocó.

Unos trabajos que se prolongarán hasta la primavera y para los que se ha destinado una aportación económica de unos 120.000 euros. "El telón no se volverá a colocar hasta que todo esté listo", añadía. Ni la barra que cayó ni el propio telón se podrían volver a colocar ya que ambos sufrieron serios desperfectos, según indicaron trabajadores de escena. El telón rojo del Liceo era de un mecanismo doble, de guillotina y a los lados, lo que lo hacía más complejo y pesado.  Mientras no sea repuesto, lo que verán los espectadores del teatro es otro telón, negro, que ya estaba instalado y que funcionaba según el criterio del director de cada uno de los montajes.

Frente a las afirmaciones de trabajadores del Liceo y del Comité de Empresa de que en los últimos años se había recortado los medios y recursos para mantenimiento y seguridad, Guasch insistía en que el Liceo nunca ha escatimado fondos en esa cuestión y subrayaba que la caída del telón se produjo por una "actuación negligente" en la manipulación de un variador que imposibilitó detectar el anormal funcionamiento de la barra del telón que es lo que pasó  el 13 de enero. Esa manipulación errónea ya se ha solventado, explicaba Guasch,  pero pese a ello se está ejecutando una revisión a fondo de todos los mecanismos. Fuentes del Comité de Empresa insisten en que no está claro el origen de la avería y quieren que un ingeniero independiente se pronuncie.