_
_
_
_

Decenas de usuarios de Car2go guardan de noche los coches de alquiler en sus garajes privados

Las dos empresas que arriendan los vehículos en Madrid podrían imponer multas de hasta 250 euros

Un usuario de Car2Go se dispone a utilizar un vehiculo en Madrid.Foto: reuters_live | Vídeo: JAIME VILLANUEVA

Decenas de coches eléctricos de alquiler, según comprobó este periódico in situ, son guardados por sus usuarios cada noche en aparcamientos particulares para utilizarlos de nuevo al día siguiente de forma exclusiva. De esta manera, los arrendatarios se reservan unos vehículos que debían estar a disposición del resto de clientes de las aplicaciones Car2go y Emov. Car2go afirma que las personas que realizan estas prácticas son minoría y que pueden ser penalizadas con 250 euros, grúa aparte. Emov dice no haber detectado casos. Pero varios usuarios con los que ha contactado EL PAÍS confirman la situación.

Más información
Caught: Madrid car-sharing users stowing vehicles away overnight

Las compañías Car2Go y Emov, (que alquilan coches eléctricos mediante una aplicación y que cobran 19 céntimos por minuto de uso) empiezan a experimentar los problemas que genera la picaresca: decenas de clientes guardan cada noche estos vehículos en sus garajes particulares. Al cerrar la aplicación, el contador deja de correr, pero nadie puede acceder al vehículo por estar guardado en una propiedad privada. Esta práctica, revelada por Vozpopuli, provoca que los clientes que acuden de noche o a primera hora a recoger un coche a la ubicación que les señala el móvil no lo encuentren y su desplazamiento sea en vano. Ya de mañana, y tras levantarse, el infractor tiene el auto en su garaje listo para ser usado solo por él. Esta situación se produce, principalmente, en Madrid, la ciudad con más usuarios por vehículo de Car2Go en Europa. Cada coche se alquila entre 12 y 15 veces de media por jornada.

Más información
La economía colaborativa se mueve en automóvil
El sector del ‘car-sharing’ denuncia que Carmena promociona a Car2go

La empresa solo admite que entre los 2,2 millones de personas en el mundo que usan su servicio “hay excepciones”. Car2Go, que dispone de 500 modelos Smart de dos plazas y más de 140.000 clientes en Madrid, defiende que en su normativa figura expresamente que los usuarios no pueden terminar el alquiler del coche en un aparcamiento privado. La multa para este tipo de prácticas es de 250 euros (los gastos de la grúa aparte). La compañía alemana no da cifras sobre el número de los casos detectados. “Que uno de nuestros coches se aparque en un garaje privado ocurre muy raramente y va contra de los términos y condiciones del servicio”, afirman. Añaden, no obstante, que “están luchando” contra las “malas prácticas”.

Un coche de Car2Go estacionado en un garaje durante la noche.
Un coche de Car2Go estacionado en un garaje durante la noche.El País

Por su parte, Emov —el segundo operador de car sharing — sostiene que no le consta ningún usuario que haya aparcado en una plaza particular.

Sin embargo, si se consulta las aplicaciones de ambas compañías se ve claramente el incumplimiento de decenas de usuarios, fundamentalmente durante al atardecer. Este periódico comprobó hace dos noches cómo los vehículos que aparecían aparcados lejos de las a calles se encontraban en el interior de aparcamientos privados.

El madrileño Alonso T., que es usuario habitual de Car2Go, vivió este mismo miércoles la mala experiencia en el barrio de Lavapiés. “Reservé un coche a través de la app en la calle de Mallorca y cuando llegué allí no estaba. Miré en la calle de arriba y en la de abajo por si acaso era un fallo de localización, pero no, estaba dentro de un edificio”, se queja. “Me dieron ganas de pasarme toda la mañana reservándolo para que el desaprensivo que lo había guardado en su garaje no pudiera utilizarlo en todo el día”. Alonso asegura que esta misma experiencia la sufrió en Berlín cuando residía allí por motivos de trabajo.

Paco Gómez, canario y residente en Madrid, usó las redes sociales para avisar a la compañía sobre algunos casos de usuarios que infringían las normas. El caso del que dejó constancia fue el de un coche claramente estacionado en el interior de una vivienda de la calle de Eduardo Riquer Mínguez (barrio de Embajadores). “Vi lo que sucedía en algún que otro caso y lo reporté directamente por Twitter a la compañía. Pero nadie me contestó nada ni me dieron una solución como usuario”.

La tendencia, que va creciendo, se observa claramente desde hace unas semanas en la capital a través de las aplicaciones a medida que se va haciendo de noche: el centro de Madrid se va vaciando de coches de alquiler y muchos de ellos se agolpan en las zonas de la periferia.

“Allí no había nada”

B. M, es usuario habitual de Car2Go. Denuncia que en varias ocasiones sufrió las consecuencias de estos malos hábitos. “Varias veces fui a las ubicaciones que me indicaba la aplicación para alquilar el coche y, al llegar, allí no había nada. Supongo que si el vehículo figuraba allí, estaría dentro de un garaje y por eso no lo vi”, afirma.

A su vez, se queja de que cuando se acerca la noche, es muy difícil alquilar un Car2Go o un Emov en el centro. “Si te fijas, cuando anochece apenas hay cuatro o cinco coches que se puedan coger en Chueca, Gran Vía... Esas zonas”.

Carlos Blanco, director de Márketing y Comunicación de Emov, lo niega: “Disponemos de una política de sanciones y no tenemos constancia de estos hechos”. La empresa, de origen español, se ha convertido en el segundo operador de car sharing en Madrid y es competencia directa de Car2Go.

Las diferencias entre los dos líderes del sector

Tanto Car2Go como Emov se mueven con la llamada filosofía 'free floating'. Este sistema permite a los usuarios de sus respectivas aplicaciones alquilar y dejar el coche en cualquier punto de la ciudad, siempre que este se halle incluido en las zonas de servicio delimitadas por cada compañía.

Car2Go dispone, desde 2015, de 500 vehículos de dos plazas. Los clientes pueden circular con ellos solamente dentro de los límites de la M-30. Al ser eléctricos, están exentos de pago en la zona SER.

Emov comenzó a funcionar el pasado 19 diciembre en la capital y es la competencia directa de Car2Go. Sus usuarios disponen también de 500 vehículos, pero de cuatro plazas y pueden salir de la M-30 si no exceden los límites de los barrios de Ciudad Universitaria, Ciudad Lineal y Fuencarral-El Pardo.

Tanto los Emov como los Car2Go pueden ser estacionados gratis en áreas de aparcamiento regulado y su circulación está permitida aunque haya alerta por contaminación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_