Donde el sur es el nuevo centro

1. Plaza de España. Sí, es decadente, pero paseo con Otto, mi perro, todas las mañanas. Le he cogido el gusto a sus edificios abandonados, a las tribus urbanas que lo habitan e incluso a los turistas que no sé qué fotografían al son del clip clap de sus cámaras.

2. Club Fedrigoni. Un lugar para inspirar a los amantes del papel, que ofrece una variada oferta de eventos donde se exploran las posibilidades creativas de este material. En realidad, un templo para frikis del diseño gráfico a la vieja usanza, como es un servidor. (Duque de Liria, 6)

Más información

Loros de lentejuelas en Pontejos

Pachanga en Valdebebas

3. HanSo Café. Además de un buen café de origen te puedes tomar un frappé de té matcha con azukis (¡tienes que intentarlo!). Su encanto radica en el guiño asiático que los dueños de origen chino dan a su carta vegan-friendly. Y, por supuesto, la amabilidad y simpatía oriental que les caracteriza. (Pez, 20)

4. Do Design. Lucía Ruiz-Rivas llena el espacio de Do Design de objetos y complementos, donde se valora lo hecho a mano con materiales locales y sostenibles. Además, en sus paredes cuelga el trabajo de ilustradores y diseñadores emergentes. Es como si entraras en su casa, una de carácter cosmopolita y con raíces mediterráneas. (Fernando VI, 13)

5. La Hummusería. Un gastrobar encima de un parking en la que probar la deliciosa comida mediterránea de Israel. El plato estrella, el hummus servido en múltiples combinaciones a cual más sabrosa. Nunca he estado en Tel Aviv, pero desde ya está en la lista de viajes deseados. (Hernán Cortés, 8)

6. peSeta. La marca de complementos más castiza de abre nuevo espacio en el barrio más turístico de la capital, donde además de sus productos se pueden comprar otros hechos en España. Eso sí es amor por lo local, apoyo y difusión al producto y el talento patrio. (Huertas, 37)

7. Rayén Vegano. Un restaurante donde todo lo que comes es de origen vegetal. Lo que cualquiera que se acerque va a encontrar es una cocina suculenta, ecológica, de proximidad y hecha con mucho cariño. Acompañada de una selección de aguas especiadas y bebidas digestivas. (Lope de Vega, 7)

8. Sandwich Mixto. No es una imprenta, tampoco es una tienda, ni una escuela. Es Sandwich Mixto, el epicentro de las microediciones en Madrid. Todo el que ha autoeditado algo sabe dónde está. El resto no os lo podéis perder. ¿Qué es eso de la risografía? (Santa Isabel, 5. Puesto 19 a 21)

9. La Casa Encendida. La cultura en Madrid no se puede entender sin La Casa Encendida. Con una programación sin prejuicios, valiente, amplia y con precios populares, que apuesta por actividades inclusivas para todos los públicos. (Ronda de Valencia, 2)

10. Barrio de San Isidro. El Madrid más auténtico y molón se construye al sur del río Manzanares. Casas o estudios de artistas que se convierten en clubs, cines improvisados o salas de conciertos. Lugares como los recién estrenados Mala Fama Estudios (Avenida Pedro Diez, 25), Casa Banchel o Vaciador 34 (Matilde Hernandez, 34), hacen que no eches de menos lo que ocurre en Bushwick, SoPi, Peckham o Neukölln.