Coque Malla para el puente navideño
El músico madrileño presenta este lunes su nuevo disco en el WiZink Center
No muchos artistas españoles pueden presumir de tener más reconocimiento en sus carreras en solitario que cuando formaban parte de un grupo famoso. Sin embargo, Coque Malla sobrepasó el éxito de Los Ronaldos a fuerza de hacer grandes canciones y adoptar una actitud de humildad y de no querer aparentar más de lo que era. Una madurez bien entendida para alguien que procedía de un grupo juvenil que basaba su gracia en letras a veces superficiales y básico rock and roll que solo incidía en el rollo ese de pasarlo bien por el mero hecho de tener menos de veinte años.
Con ese respeto a los artistas que le precedieron, y reconociendo su inspiración en Dylan, Patti Smith, los Stones, Lou Reed, y hasta Rubén Blades, Coque Malla empezó a tejer una carrera seria y coherente con discos cada mucho tiempo, pero todos ellos publicados en el justo momento que él pensaba que tenía algo que aportar, nada de soltar unas cuantas canciones pegadizas al rebufo de su fama. Acaba de editar El último hombre en la tierra, un disco sencillo y sobrio que le muestra tal cual es, un cuarentón a punto de ser padre por segunda vez que no necesita adoptar otras poses. El lunes lo presenta en uno de los espacios del WiZink Center en plan íntimo y casi familiar y del que dice que “recordará durante toda su vida”.
El de Malla puede ser el gran concierto de estas fiestas, y de este puente, pues la noche de mañana sábado Madrid se va a encontrar prácticamente sin música en directo, por eso de las cenas familiares. Menos mal que hoy viernes se salva con esa evocadora formación que responde al nombre de Mastretta en el Berlín. Precisamente un hermano de Coque, Miguel, suele tocar el saxo en esa banda mágica y casi siempre instrumental que capitanea el clarinetista Nacho Mastretta.
Y ya que no hay grandes figuras internacionales de visita estos días en la ciudad, bien cabe contentarse con las llamadas “Bandas Tributo”. Esta misma noche coinciden varias. En el Nuevo Apolo la que homenajea a Supertramp; en el Clamores la que repasa el repertorio más funky del genial James Brown; y en el Wulri, un doble cartel que tiene en Nirvana sus referencias: Neverminders y Ni Foo Ni Fighters.
En el Taboó siguen celebrando sus quince años de existencia con las actuaciones de The Chandals y Sophia-C, seguidas de una sesión hasta la madrugada con DeeplomaticNights, un abrasivo colectivo de DJs. Hoy tambiénpuede ser una buena noche para tomarle el pulso al gospel nacional, toda vez que ya ha finalizado el festival internacional dedicado a él. En el But lo muestran Black Light Gospel Choir, una coral que ha llegado a hacer coros a Alejandro Sanz y que repasan repertorio clásico del género y versiones adaptadas de grandes canciones del pop.
Como cada navidad, vuelve al Siroco el grupo The New Demolators. Es la mejor sacudida punk posible con la que el domingo por la noche se pueda uno quitar del empacho navideño y la cena y la comida con familia y cuñados. Además, también esa noche, en el Café de la Palma la rima y el hip hop suenan poéticas y elegantes con El Chojín, uno de los artistas pioneros del rap en español.
AGENDA
VIERNES: Mastretta, Berlín Café (Costanilla de los Ángeles, 20), 23:00. 10 euros. The Chandals + Sophia-C, Taboó (S. Vicente Ferrer, 23), 21:30. 10 euros. Black Light Gospel Choir, But (Barceló, 11), 21:30. 25 euros. Supertramp Tribute, Teatro Nuevo Apolo (Pza. Tirso de Molina, 1), 20:30. Desde 35 euros. Ni Foo Ni Fighters + Neverminders, Wurlitzer Ballroom (Tres Cruces, 12), 22:00. 8 Euros. James Brown Tribute, Clamores (Alburquerque, 14), 23:00. 8 euros.
DOMINGO: The New Demolators, Siroco (San Dimas, 3), 21:00. 6 euros. El Chojín, Café La Palma (La Palma, 62), 21:00. 22 euros.
LUNES: Coque Malla, WiZink Center (Av. Felipe II, s/n), 19:00. 27 euros.
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