El Ayuntamiento ultima el proceso para municipalizar 14 cementerios

Con la municipalización de los servicios funerarios en Madrid, el Consistorio pretende resolver el problema del deterioro de los camposantos municipales y a la vez mejorar la calidad del servicio público que ofrecen. Por ello, el concejal de Economía y Hacienda, Carlos Sánchez Mato, y el delegado de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, visitaron este martes al cementerio de La Almudena y anunciaron un plan "integral y ambicioso", a medio y largo plazo para la gestión de los 14 cementerios de la ciudad.

El Consistorio defiende que la nueva sociedad mercantil Empresa Municipal de Servicios Funerarios (EMSF), de capital íntegramente público, "supone una ventaja económica clara". Además de recibir los activos en el balance de la actual compañía que gestiona los cementerios y tanatorios madrileños, la nueva empresa disfrutará de una bonificación del 99% en el impuesto sobre sociedades y estará exenta del IBI.

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El ahorro generado gracias esta municipalización se revertirá en la capacidad inversora de la nueva empresa para la mejora de sus servicios, según reveló una nota del Consistorio que señaló que "el plan de negocio contempla un esfuerzo inversor adicional por parte de la nueva sociedad pública ante el deficiente estado de conservación en los cementerios".

El Ayuntamiento de Madrid subrogará a los 529 trabajadores de la EMSF porque considera que es la plantilla adecuada para seguir dando respuesta a la demanda existente. La presidencia de la nueva sociedad la ostentará Javier Barbero y la vicepresidencia Carlos Sánchez Mato, quienes, desde hace un año, han liderado el proceso de municipalización de la gestión de los servicios funerarios. La gerencia la ocupará Fernando Sánchez, presente en la visita "protocolaria" a La Almudena.

Un 49% por 100 pesetas

La municipalización de la EMSF deja abierto el capítulo sobre las reclamaciones de Funespaña, una empresa controlada por la aseguradora Mapfre y que en 1992, cuando el Consistorio madrileño decidió privatizar parte de la compañía, adquirió el 49% de la empresa mixta. Funespaña compró su parte por tan solo 100 pesetas (unos 60 céntimos de euro), pero ahora reclama un porcentaje valorado en 53,8 millones de euros.

El gobierno local negoció en los meses pasados con la aseguradora para que su salida del accionariado de EMSF no le prive del 9,2% de sus ingresos, que ahora provienen de Mapfre. El Ayuntamiento calcula que la viabilidad de la nueva compañía dependerá de que no pierda más del 11% de ingresos al convertirse en 100% pública. Pero asegura que no cederá a la petición de Mapfre de quedarse la mitad del patrimonio de la funeraria.

Durante su visita al cementerio La Almudena, el concejal de Economía Carlos Sánchez Mato se mostró tajante al respecto: "Nosotros no podemos entregar el 49% del patrimonio neto de la empresa al socio privado porque la concesión que aceptaron en su momento especifica que cuando acabe la misma, el patrimonio —tanto el activo como el pasivo— revierte al Ayuntamiento de Madrid", afirmó. Y se dijo dispuesto a llevar la cuestión a los tribunales, según declaraciones recogidas por Europa Press.

"Los madrileños se merecen que podamos trabajar los cementerios a fondo como lugares de patrimonio histórico, cultural y, sobre todo, espacios que tienen que ser de máxima tranquilidad, cuidado y mimo de los familiares", agregó Barbero durante la visita.