El PP deja atrás a Unidos Podemos en la capital y el PSOE remonta

Como si se hubieran puesto de acuerdo para dar vida a un tópico, un joven con cresta cogía ayer la papeleta de Unidos Podemos mientras a su lado un cincuentón engominado metía en el sobre una del PP. Eran en torno a las 12.30 de la mañana en el colegio Isabel la Católica, junto al metro de Tribunal, en el distrito Centro, y representaban, de paso, los dos extremos que se anunciaban como los ganadores de la jornada, aplastando casi todo lo quedaba en medio: el PSOE y Ciudadanos. Pero las encuestas volvieron a fallar y el prometido escenario de polarización no fue tal, sino que las urnas regresaron al eje entre nuevos y viejos partidos. Y en esa pelea, los paladines del bipartidismo han recuperado fuelle.

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Sobre todo, lo ha hecho el PP, aunque la mejora depende de con qué se compare. Si se hace con las antiguas mayorías absolutas de un partido que ha ganado todas y cada una de las elecciones generales desde 1989 en la capital, un 40,1% de los votos probablemente no es un resultado espectacular. Sin embargo, si se compara con el 35,74% de las elecciones generales del pasado mes de diciembre, y se tiene en cuenta que se han conseguido 50.000 votos más en unas circunstancias que se preveían muy adversas para la formación conservadora, la lectura cambia mucho.

La leve mejora del PSOE

Algo parecido ocurre con el PSOE, que ha conseguido detener la caída imparable de las últimas elecciones, que le llegó a relegar al cuarto lugar en la capital el pasado diciembre, por detrás de Podemos y de Ciudadanos. Entonces consiguió un 17% de los votos, solo un poco por encima del 15,3% que consiguió en 2015 el candidato socialista a la alcaldía Antonio Miguel Carmona; aunque en aquella ocasión quedaron terceros.

Pero ayer los socialistas remontaron algo más de dos puntos hasta el 19,23% y se quedaron muy cerca de Unidos Podemos (21,23%). Se trata de un respiro para el PSOE de Madrid, comandado desde hace un año por la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, tras el negro periodo que siguió a la destitución de Tomás Gómez. Antonio Carmona, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, también fue sustituido en agosto pasado por Purificación Causapié.

Sin embargo, los socialistas se mantienen en la capital por debajo de Unidos Podemos, es decir, en una tercera posición que tampoco permite alegrías al recordar aquellos porcentajes de las victorias de José Luis Rodríguez Zapatero en 2008 (entonces el PSOE consiguió en la ciudad de Madrid un 38% de los sufragios) y en 2004 (entonces fueron el 41,77%). Además, los socialistas han perdido el primer puesto en el único distrito en el que que ganaron el pasado diciembre: Villaverde, donde ayer venció el PP.

La caída de Podemos

De hecho, los populares han sido la fuerza más votada en 18 de los 21 distritos de la capital, ya que, aparte de Villaverde, ayer le arrebataron Usera y Vicálvaro a Podemos. La formación morada, esta vez unida con IU, solo ha obtenido el primer lugar en Centro, Puente de Vallecas y Villa de Vallecas, aunque ha quedado como segunda fuerza en otros nueve distritos.

Pero el hecho es que Unidos Podemos ha sufrido una importante pérdida de confianza en la ciudad de Madrid, donde precisamente gobierna desde hace un año con una confluencia similar bajo las siglas de Ahora Madrid y la dirección de Manuela Carmena; la alcaldesa, como hizo en la anterior campaña electoral, no ha querido participar en esta. Sin embargo, el PSOE en el Ayuntamiento, que apoyó con sus votos la investidura de Carmena, acusó hace solo unos días al equipo de gobierno municipal de electoralismo al anunciar una bajada de la factura del IBI en determinados barrios poco antes de la celebración de los comicios.

Es imposible medir el impacto de esta polémica o de otras que sufrido el Ayuntamiento de Madrid en los últimos 12 meses, pero los resultados de las elecciones de ayer pueden apuntar a un cierto desgaste de Ahora Madrid tras un año de legislatura.

Asimismo, los datos hacen pensar que el proyecto conjunto de la izquierda madrileña no ha conseguido atraer hacia la confluencia a buena parte de los votantes clásicos de Izquierda Unida, una parte de los cuales, además, han podido apuntalar el repunte de los socialistas tanto en la capital como en toda la Comunidad. Unidos Podemos consiguió ayer algo más de 367.000 votos, menos de los que había conseguido Podemos solo el pasado mes de diciembre: 376.283. Entonces, IU había conseguido 96.366 sufragios.

Ciudadanos aguanta el tipo

Las encuestas también señalaban la de ayer como una jornada negra para Ciudadanos, pero finalmente no lo fue tanto. La formación naranja, que sostiene al Gobierno del PP en la Comunidad, perdió ayer algo menos de un punto con respecto a las elecciones de diciembre: del 17,41% ha pasado al 16,57%. Aunque hubiera mantenido el resultado de hace seis meses, habría perdido igualmente la tercera posición que alcanzó entonces, debido al avance de los socialistas madrileños.

En todo caso, la caída del partido de Albert Rivera en la capital ha sido más atenuada que en el resto de la Comunidad: en la ciudad de Madrid ha perdido 27.000 (el 38%) de los 70.000 sufragios, lo que le ha supuesto la pérdida de un diputado con respecto a las últimas elecciones; ha obtenido esta vez seis. Ciudadanos ha conseguido el segundo puesto en ocho distritos: Barajas, Chamartín, Chamberí, Hortaleza, Moncloa-Aravaca, Retiro y Salamanca.

Senadores del PP

En la ciudad de Madrid, los tres aspirantes al Senado con mayor número de votos fueron los del Partido Popular: Pío García-Escudero, María Rosa Vindel y Carlos Aragonés. Los tres, de hecho, han conseguido, con los votos del resto de la Comunidad, un asiento en la Cámara Alta por Madrid.

Sin embargo, el cuarto candidato al Senado más votado en la capital, Eva Abril, la candidata de Unidos Podemos, no ha conseguido la plaza. Finalmente, esa tercera plaza ha sido para el alcalde de Móstoles, David Lucas, que aun siendo menos votado en la ciudad obtuvo más sufragios en el conjunto de la región.