El adelanto de las rebajas en junio divide al comercio catalán

El 1 de julio ha sido tradicionalmente el pistoletazo de salida de las rebajas de verano. Sin embargo, es cada vez más frecuente que algunas tiendas, especialmente grandes marcas, apuren el calendario y exhiban los tradicionales carteles rojos ya en junio. El presidente de Barcelona Comerç, Salva Vendrell, lamenta que no haya un consenso en el sector y recuerda que el pequeño comercio es el más afectado. Adecco calcula que la campaña generará 26.819 empleos en Cataluña.

Los tradicionales periodos de rebajas fueron suspendidos por el Tribunal Constitucional en septiembre del año pasado, a instancias del Partido Popular, una vez se recurriera la ley catalana de comercio. Muchas tiendas, especialmente las grandes, se agarraron entonces de un decreto estatal, de 2012, que daba la potestad de hacer los descuentos cuando lo consideren necesario.

Al menos siete de las tiendas de Portal de l’Àngel, la calle comercial barcelonesa por excelencia, ya muestran descuentos de hasta el 50% en los precios de ropa y complementos. La cadena sueca H&M, de hecho, exhibe al lado de los llamativos letreros de sus vitrinas el periodo de rebajas que por el que ha optado: del 23 de junio al 13 de agosto.

“El tema de las rebajas se ha convertido en un sálvense quien pueda”, lamenta Vendrell. Desde Barcelona Comerç, que agrupa a los ejes comerciales, sostienen que hay cierto misticismo en la palabra “rebajas” y por tanto piden se acote a los periodos tradicionales de después de Navidad y en verano. “Nos gustaría que hubiera un consenso sobre el calendario de la temporada, pero ese depende únicamente de la buena voluntad de las grandes marcas”, acepta Vendrell.

La Generalitat está preparando una nueva normativa que permita reemplazar la que ha sido suspendida. Desde el Departamento de Empresa aceptan que el texto podría hacer recomendaciones orientativas sobre las temporadas de rebajas pero “no como exclusivas ni obligatorias”.

Junto a los carteles de descuentos conviven además otras ofertas con nombres tan sugerentes como “Summer days” o “precios especiales”. Se trata de rebajas encubiertas que terminan empalmando con el periodo de julio y agosto. “Todos hemos tenido que tirar de estas promociones para poder hacer caja en los tiempos de crisis”, justifica Vendrell.

Más movimiento

Pero no todas las tiendas se montan en el carro de adelantar el periodo de rebajas. Algo que también se ve en Portal de l’Àngel. Las del grupo Inditex (Zara, Bershka o Pull&Bear) o el Corte Inglés no han anunciado aún la temporada de precios bajos mientras que Mango, Cortefiel o Benetton sí. “Tan pronto como pones los carteles de las rebajas notas que hay más movimiento en las tiendas”, asegura una dependienta de H&M. La cadena sueca ajustó su calendario para sacar provecho al primer fin de semana del verano.

Las tiendas pequeñas, sin embargo, prefieren esperar. La política de ofrecer descuentos casi todo el tiempo bajo diferentes formatos tensiona aún más su situación y en la temporada oficial de descuentos los clientes esperan precios realmente atractivos. En la temporada de 2015 las ventas subieron 0,88% tras años de caídas sucesivas según el Indicador Comercio de Barcelona.

Los buenos pronósticos para el verano en Cataluña también se trasladan al comercio. Vendrell asegura, sin cifrarlas, que las previsiones “son muy buenas”. “El aumento en el gasto de los hogares el año pasado es muy alentador, esperamos que la recuperación se note más”, asegura.

Adecco presentó ayer un informe en el que calcula que la campaña de las rebajas de verano generará un total de 26.819 empleos en Cataluña, el 74% en la provincia de Barcelona. El comercio catalán será el que más empleo de temporada generará en toda España.