Colau defiende el liderazgo público de la economía ante los empresarios

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, defendió ayer ante los empresarios de la ciudad “el liderazgo público de la economía” para que “se traduzca en beneficios sociales”. Colau fue la invitada de los almuerzos que regularmente organiza la Cámara de Comercio, en el que fue su “primer gran encuentro con el mundo empresarial” barcelonés”, subrayó al inicio de su intervención. La alcaldesa reconoció que los indicadores económicos de la ciudad son buenos, pero alertó de que cada vez hay mayores desigualdades.

Para reforzar su tesis, la alcaldesa citó al presidente del Círculo de Economía, Antón Costas, “hoy [por ayer] escribe en un artículo que el mito de que el crecimiento económico beneficia a todo el mundo ya se ha demostrado falso”. En el turno de preguntas, los empresarios expresaron su preocupación porque medidas tomadas por el Ejecutivo municipal como la moratoria de apertura de nuevos hoteles paralicen la economía. La respuesta de Colau fue clara: “Les reto a que alguien diga cómo se ha parado la economía, los indicadores crecen”.

En la impresionante sala de la Llotja y ante un auditorio de varios cientos de empresarios Colau expuso los cinco ejes de lo que defendió como “un modelo de transición para pasar del modelo actual, o de la ausencia de modelo, y recuperar el liderazgo público para construir un modelo que ponga la economía al servicio de las personas”. Un modelo que debe basarse en la “sostenibilidad integral, una economía diversificada, territorialmente integrada y socialmente responsable”.

El primero de los cinco ejes que expuso Colau es una nueva relación público-privada para combatir las desigualdades. El segundo, diversificar la economía y evitar “monocultivos que han demostrado ser un fracaso, como el ladrillo o el turismo”. Tercero, “la innovación como motor de cambio”, y en concreto una apuesta por la reindustrialización de la región metropolitana, donde la estrategia del Ayuntamiento de Barcelona pasará por “fomentar el eje del Besòs, aprovechando la estación de la Sagrera, un eje que discurre desde Vallbona hasta Diagonal Mar”. El cuarto eje que defendió la alcaldesa es el fomento de la economía cooperativa y en red. Y el quinto, tener en cuenta la escala metropolitana y el protagonismo de Barcelona en la Euroregión.

La alcaldesa insistió en la idea de que la sociedad está “en un momento de cambio, en el sentido amplio y profundo de la palabra, que ha llevado cambios políticos que pocos imaginaban”. Ni ella misma, reconoció quien fuera activista, experta en vivienda y líder y fundadora de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca.

Entre las preguntas afloraron cuestiones como el top manta —defendió una estrategia compleja y no solo policial—, o los horarios comerciales. Aquí la alcaldesa se mostró contraria a la liberalización, pero dispuesta a “hacer alguna excepción si se hace con el consenso de todo el mundo e introduciendo compensaciones si la otra parte resulta perjudicada”. También afloró el debate del Parlament y la alcaldesa opinió que el proceso independentista “no debería concentrarse en una sola persona”.