Los primeros refugiados llegarán a Barcelona en noviembre

El Ayuntamiento de Barcelona, el primero que se puso en marcha para acoger a refugiados de guerra, en la iniciativa #CiutatRefugi, ha detallado hoy el dispositivo que pondrá en marcha. El coordinador del plan, Ignasi Calbó, ha explicado que los primeros 1.200 refugiados con destino a Cataluña procedentes de Siria, Afganistán y Eritrea, podrían llegar en noviembre. Calbó ha reprochado a las autoridades españolas la falta de cifras oficiales y ha asegurado que la de 1.200, 600 de las cuales se quedarían en Barcelona, es la que dan por buena las ONG que están sobre el terreno.

Los refugiados serán recibidos en primera instancia en un centro de primera acogida que se instalará en el edificio Fórum. Allí estarán un máximo de uno o dos días, con el objetivo de analizar su estado y sus necesidades y expectativas, y desde allí serán trasladados a los centros de acogida que se habiliten. De forma inmediata Colau, viajará la semana que viene con un equipo técnico a ciudades de tránsito expertas en la acogida de refugiados como Viena (Austria), Múnich o Leizpig (Alemania). El Ayuntamiento destinará inicialmente 10,5 millones al dispositivo.

La directora del CUESB, el centro de emergencias sociales del Ayuntamiento, Isabel Ferrer, ha explicado que los refugiados serán tratados como "supervivientes". "Son víctimas de una grave emergencia y nosotros somos especialistas en atender a personas en situación traumática", ha explicado y ha asegurado que se hará trajes a medida de cada caso. "El éxito de la acogida será vincular las expectativas de la gente con lo que encontrarán", ha concluido.

Sobre el emplazamiento elegido, ha argumentado que el Fórum es una zona que "permite hacer una primera atención de manera aislada, protegiendo a estas personas que han perdido todos sus bienes, han perdido familiares... unas situaciones que además han sido muy dilatadas en el tiempo y cuando han llegado a lugares donde esperaban estar seguros no ha sido así", ha relatado.

El plan tiene varias fases de actuación, desde el reconocimiento de los refugiados en las zonas de tránsito hasta el seguimiento social y el cierre del dispositivo. La primera fase consistirá en el traslado de un equipo multidisciplinar de valoración a la zona de transición que permita que la acogida posterior sea la mejor. En la fase de recepción, los refugiados recibirán una primera atención médica social y psicológica en el edificio Fórum.

La fase de acogida, de entre una semana y diez días, es la que se centrará en las personas que tengan como destino en territorio catalán y consiste en facilitar un alojamiento que permita cierta intimidad y el acceso a los servicios sociales. De aquí los refugiados se dirigirán hacia equipamientos o viviendas que faciliten su integración en Barcelona o en otros domicilios.

El ayuntamiento ha explicado que la siguiente fase será la de seguimiento social y que en total, la intervención oscilará entre seis meses y un año.