La CUP se convierte en la clave para la independencia
Los independentistas de Antonio Baños llaman a desobedecer las leyes españolas y sostienen que Artur Mas no es imprescindible
La izquierda anticapitalista tendrá que pactar con Junts pel Sí, La coalición de Artur Mas y Oriol Junqueras, que logró 62 representantes, y necesitará los 10 de la CUP para alcanzar la mayoría absoluta de 68 escaños. “El proyecto independentista sigue adelante y constata que Mas no es imprescindible”, dijo la número dos, Anna Gabriel.
En cuanto al porcentaje de votos, la CUP (8,2%) y Junts pel Sí (39,6%) sumarían el 47,8% de los sufragios. La coalición liderada por Raül Romeva declaró que le basta una mayoría de escaños. Mientras que la CUP aspiraba durante la campaña electoral a una mayoría de votos y escaños para obtener “el mandato democrático”. Anoche no entró a valorar las mayorías tras conocer los resultados pero volvió a dejar claro que no hará “descarrilar el proceso”. Se sentará a negociar para apoyar a un Gobierno provisional secesionista pero permanecerá en la oposición.
Los candidatos de la CUP, Baños y Gabriel, mantuvieron en esta campaña que son “un voto seguro para la independencia”. No pondrán trabas. Su única condición es que se trabaje en un proceso constituyente hacia una República catalana. Los problemas llegarán si Junts pel Sí impone a Artur Mas como presidente de la Generalitat. Los anticapitalistas insitieron ayer en que no le investirán. Todavía no han decidido si optarán por abstenerse. Baños había propuesto a Junqueras o Romeva, como personas de consenso para ocupar la presidencia. Pero también afirmó que “quién sea el presidente es irrelevante".
La CUP celebró la alta participación (77,4%) y que los votos hayan ratificado el carácter plebiscitario y constituyente que concedieron a estos comicios. La hoja de ruta de los independentistas difiere de la de Junts pel Sí en un punto clave: la Declaración Unilateral de Independencia (DUI). Aunque ayer no hablaron de ello, como tampoco lo hicieron del porcentaje de votos obtenido.
Junts pel Sí opta por un proceso pactado con el Estado y la CUP quiere iniciar la “desobediencia de la legalidad española” y romper con las estructuras autonómicas para que Cataluña sea un sujeto político jurídico soberano desde hoy. La diferencia está en que la CUP quiere negociar con España desde una posición de igualdad y Junts propone 18 meses de transición pactada. La otra condición de la CUP es poner en marcha un “plan de choque” para paliar la situación de emergencia social.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.