‘Corralito’ presupuestario para el nuevo gobierno de Castellón

El anterior equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castellón, encabezado por Alfonso Bataller (PP), ha consumido en medio año 700.000 euros en gastos para órganos de gobierno y publicidad a pesar de que la partida presupuestada para todo el año era de 500.000. El vicealcalde, Enric Nomdedéu (Compromís), denunció el viernes que la situación heredada es de “corralito” y ha llegado a pedir simbólicamente al nuevo equipo que no se gasten más de 60 euros cada semana porque “no hay nada”.

De esos 700.000 euros gastados, la mayor parte corresponde a publicidad realizada en año electoral. El gasto se ha hecho “sin ningún tipo de control”, ha indicado Nomdedéu. El vicealcalde ha recordado que ha sido justo esto (el gasto sin control en publicidad) “lo que provocó la salida por la puerta de detrás de Bataller”, en referencia a su dimisión tras verse implicado en la Operación Púnica. El Consistorio había contratado publicidad a finales del pasado año con una de las empresas de Alejandro de Pedro, considerado uno de los conseguidores de la trama, y se vio obligado a suspender el pago tras destaparse la red. Los últimos días de Bataller en el consistorio estuvieron protagonizados por la entrada de la Guardia Civil para solicitar los contratos y su posterior declaración en la Comandancia.

No ha sido la única sorpresa que se ha encontrado el nuevo Gobierno formado por PSPV-PSOE y Compromís. El Consell de Govern ha aprobado en los últimos días una modificación de crédito de 2,13 millones. De ellos, 1,175 millones irán destinados a pagar facturas halladas fuera de contrato para servicios como el gas, electricidad, limpieza de colegios, etcétera. También los 200.000 euros para tapar el agujero en publicidad y una partida extra de 100.000 euros para presupuestar los gastos del equipo de gobierno este año.

La inspección de las facturas también ha desvelado que el presupuesto para Cultura se ha consumido al 90%. Además, se ha “encontrado” una factura “desconocida” de medio millón de euros de una remodelación de las recientes obras del complejo deportivo Gaetá Huguet. “Cuando Bataller nos dijo que nos dejaba 2,5 millones de superávit no era cierto, porque medio millón pertenecía a facturas escondidas en un cajón y puede ser que aún nos encontremos con alguna más”, ha dicho Nomdedéu.