El orgullo de las 12 notas
La celebración del Día de la Música se extiende durante el fin de semana a varias ubicaciones
La idea data de 1982 y se le atribuye al ministro socialista francés de Cultura, Jack Lang, pero lleva ya 33 años sirviendo como excusa para reivindicar el noble arte de las 12 notas. Sí, ese sobre el que Nietzsche, tan proclive a las solemnidades, resolvió un buen día: “Sin música, la vida sería un error”. El 21 de junio, coincidiendo con el solsticio, se celebra el Día de la Música en toda Europa, pero la fiesta termina impregnando en Madrid el fin de semana completo y multiplicándose por distintos escenarios.
El festival Día de la Música llegó a acoger carteles importantes y patrocinadores de renombre, pero en 2013 entró en barrena y ya el año pasado se disimuló in extremis con un monográfico de artistas de Subterfuge, coincidiendo con el 25º aniversario de esta disquera madrileña. También por los pelos se ha salvado la celebración esta vez en el paseo de la Chopera: la primera edición del Mat Mad Festival reúne en el cartel a Jero Romero (en matiné gratuita) y, a partir de las 17.45, Ángel Stanich, Smile, Kiko Veneno, Corizonas, Ilegales y Los Enemigos. Para salpimentar el menú hay actividades infantiles por la mañana, una feria de discos de segunda mano y algunas propuestas culinarias.
La alternativa gratuita la protagonizan el domingo (20.00), en la plaza de los cines Luna, tres heterogéneas bandas de rock: Sidecars, Burning y M-Clan. Las convocan los grandes almacenes culturales Fnac, que durante todo el sábado también ofrecen 11 horas de música (con las nuevas canciones de Fernando Alfaro como atractivo estelar) en su tienda de Callao.
Y la mejor solución clásica es el peculiar programa Chaikovski Seis, con el que el Auditorio Nacional propone repasar durante todo el sábado las seis sinfonías del genio romántico ruso: la Joven Orquesta aborda la primera y la cuarta (12.00), la Orquesta Nacional de España (19.00) asume la segunda y la quinta y la Orquesta de RTVE se hace cargo, desde las 22.00, de las dos restantes. Como hilo conductor de este gozoso maratón se erige la figura de Juanjo Mena, el director vitoriano que llevará la batuta en todos los casos.
Por su parte, la Orquesta Filarmonía se alía el domingo con la cantaora Carmen Linares (Parque Lineal del Manzanares, a las 21.00, con acceso gratuito) para homenajear a Manuel de Falla y El amor brujo. Tampoco hay que rascarse el bolsillo si ese mismo día, a las 20.30, nos acercamos por la iglesia de Santa Teresa y San José para un recital teresiano en torno a Santa Teresa de Jesús, con la mezzosoprano Sonia L. Rivas-Caballero. Y por concluir con propuestas a coste cero, el sábado podemos invertirlo en el Retiro y, entre caminata y caminata, escuchar a la Banda Sinfónica Municipal al mediodía. Será en el quiosco de música, el mismo rincón donde los mejores alumnos de conservatorio de la ciudad se enfrascan en un maratón desde las 18.00 horas. Estas tres décadas no han servido para que un solo gobernante reduzca el IVA aplicado a la música, pero las 12 notas de la escala cromática seguirán resonando siempre. Aunque solo sea por no contradecir a Nietzsche.
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