Colau examinará las pensiones concedidas a los agentes del 4-F
Los guardias urbanos fueron condenados más tarde por torturar a un joven de Trinidad y Tobago
La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, prevé examinar los protocolos de concesión de pensiones a dos guardias urbanos implicados en el caso 4F, la desocupación de un edificio que tuvo graves consecuencias para la salud de un urbano y en el que varios jóvenes fueron condenados a prisión.
Colau ha hecho hoy esta consideración tras entrevistarse con la Síndica de Barcelona, Maria Assumpció Vilà, con la que no abordado este tema, según ha explicado en rueda de prensa.
Muy prudente, Ada Colau ha asegurado que hasta que no tenga toda la información disponible sobre este tema no anunciará si el ayuntamiento toma o no medidas contra la concesión de pensiones a los dos guardias urbanos, cuyas declaraciones fueron claves para la imputación de los cuatro jóvenes y que, posteriormente, fueron condenados a prisión por otro caso de torturas.
Actualmente, ambos agentes reciben una pensión de la Seguridad Social, una situación que, a juicio de Colau, "no se explica desde el sentido común". Los agentes recibieron las bajas al mismo tiempo que eran condenados por torturar a un chico de Trinidad y Tobago que habían detenido en una discoteca en la que estaban de fiesta. Según la sentencia, los agentes Victor Bayona y Bakari Samyang llegaron a apagarle cigarrilos en el cuerpo y amenazarle con una pistola.
No obstante, la alcaldesa ha precisado que "aplico el principio de prudencia y hasta que no tenga información" sobre de qué manera se han otorgado las pensiones, "no puedo anunciar ni prometer nada".
El nuevo jefe de la Guardia Urbana, Amadeu Recasens, se está entrevistando ya esta semana con los intendentes de este cuerpo, según ha explicado Colau, que espera tener información sobre este tema.
La nueva alcaldesa de Barcelona ha reiterado su "plena confianza" en el cuerpo de la Guardia Urbana.
El llamado caso 4F se refiere a los hechos sucedidos el 4 de febrero de 2006 en Barcelona, cuando la Guardia Urbana detuvo a varios jóvenes, cuatro de los cuales fueron condenados e ingresaron en prisión por su relación con la agresión a un agente durante el desalojo del edificio Palau Alòs, en la calle Sant Pere Més Baix.
El agente quedó en estado tetrapléjico debido a una agresión, que no se ha aclarado cómo sucedió.
Una de las personas detenidas y enviadas a prisión era la joven Patricia Heras, que se suicidó durante un permiso penitenciario el año 2011.
Estos hechos se narran en el documental "Ciutat Morta", que consiguió una gran audiencia cuando se emitió por TV3, en enero de este año.
Por lo que se refiere a la suspensión de horas extras de la Guardia Urbana, decidida por Xavier Trias y que habría supuesto un menor número de agentes en la calle en los últimos días, Colau ha indicado que con el presupuesto actual "está claro" que no se podrán cubrir las mismas horas extra que hasta ahora.
Actualmente, un guardia urbano cobra 22 euros (antes once euros) por cada hora extra, igual que un bombero de la ciudad de Barcelona, una equiparación salarial que aprobó Trias, ha informado hoy la alcaldesa.
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