El desgaste del PP por la corrupción abre Alicante a un posible cambio

Las elecciones del próximo 24 de mayo en la ciudad de Alicante están en un puño, según los sondeos de los dos grandes partidos. La posibilidad de que el PP pierda la alcaldía es un hecho, la corrupción puede pasar por primera vez factura a los populares tras 20 años en el poder. Ciudadanos se cuela como un partido clave en el espectro político municipal y la izquierda se queda al borde de la mayoría absoluta con la irrupción de Compromís y el ascenso en número de concejales de Esquerra Unida a través de su marca Guanyar Alacant.

Los últimos cuatro años no han dejado a la ciudad de Alicante sin sobresaltos políticos. La última alcaldesa electa, Sonia Castedo, se despidió por Facebook de la ciudadanía. Su segunda imputación por presuntas corruptelas urbanísticas, así como la de su predecesor y mentor, Luis Díaz Alperi, han calado en el electorado. En clave autonómica, tampoco ayuda el goteo constante vivido toda la legislatura con imputaciones y procesamientos dentro del partido.

Los sondeos de PSOE y PP son similares. El Partido Popular se mueve entre los 10 y 11 concejales, lo que le convertiría en el partido más votado aunque pueda perder hasta ocho actas municipales. Y el PSOE se encuentra entre los 8 y 9 ediles. De cumplirse este pronóstico, la irrupción de Ciudadanos sería capital para determinar si la candidata popular, Asunción Sánchez Zaplana, o el socialista, Gabriel Echávarri, se convierten en el próximo alcalde de Alicante.

Ciudadanos oscila entre los 5 y 6 concejales, nutrido principalmente por un electorado del PP y de UPyD. Según ambos sondeos, la irrupción del partido que lidera Albert Rivera desplazaría a la formación magenta del pleno municipal pese a la exhaustiva labor de su único concejal, Fernando Llopis.

La decisión que tome el candidato Cifuentes será decisiva. De cumplir los designios de su partido, a favor de que gobierne la lista más votada, el PP podría prolongarse en el poder tanto si Ciudadanos les vota como si se abstienen.

En este escenario de incertidumbre, la izquierda solo podría gobernar por mayoría absoluta. Esquerra Unida, hoy con dos concejales, conseguiría con su marca Guanyar aumentar los tres o cuatro concejales. Compromís, que ya se quedó en 2011 a las puertas del consistorio, entrará conseguirá dos actas plenarias. En la previsión más optimista de los sondeos, las tres formaciones podrían sumar 15 ediles, el límite de la mayoría absoluta.

A menos de dos semanas de las elecciones, la campaña se pone emocionante pese al bajo perfil de la misma. Tanto PP como PSOE se están volcando con la zona norte de la ciudad, la más desfavorecida y en la que el PSOE cosechó buenos resultados en las últimas europeas. Los socialistas, además persiguen el voto indeciso en barrios que cercan el centro, históricamente de los populares.

Desde la última elección de Luis Díaz Alperi, en 2007, Alicante no vivía una posibilidad de cambio tan grande en lo político. El entonces alcalde, hoy investigado en varias causas judiciales, acudía a las urnas también imputado. Consiguió la mayoría absoluta por un edil de diferencia respecto al PSOE.