Las candidatas del PP rehúyen cuatro debates electorales

Van ya dos veces en una semana que la popular Cristina Cifuentes no acude a un debate con los otros cinco candidatos a la presidencia de la Comunidad de Madrid, y sus problemas de agenda empiezan a no ser creíbles para sus contrincantes. Esperanza Aguirre, la aspirante del PP al Ayuntamiento, ha rehuido dos, uno el lunes y otro el 16 de marzo.

Las aspirantes populares no se cansan de repetir en la precampaña que están deseosas de debatir —incluso con los partidos sin representación en la Asamblea, Podemos y Ciudadanos— y que ansían encuentros televisivos sin corsé de temas o tiempos y en cualquier cadena.

Pero Cifuentes no acudió este martes a la mesa redonda organizada por Demos, una asociación solo de estudiantes nacida hace tres años. Según el relato de la entidad, invitaron al candidato del PP hace cuatro meses —cuando aún no se sabía que era Cifuentes— y han insistido por teléfono, correo electrónico y en Génova. Cifuentes se disculpó alegando problemas de agenda. Este martes inauguró las Jornadas de la Confederación Madrileña de Autónomos y Emprendedores y asistió a una reunión del Grupo Popular en el Senado,

Al menos, este martes Cifuentes no mandó un emisario, como el pasado miércoles, cuando intentó que la supliese el consejero de Asuntos Sociales, Jesús Fermosel. Pero la Asociación de Médicos y Titulados Superiores (AMYTS) no permitió el cambio porque Fermosel no estaba “entre iguales”.

De forma simbólica, Demos dejó este martes libre la silla de Cifuentes, junto a Luis García Montero, de Izquierda Unida, que ironizó: “Buenos días, Cristina. Los profesores universitarios sabemos que existe la figura retórica: estar en ausencia y en presencia. Me ha gustado esta silla vacía. Si he dado el paso de presentarme a las elecciones es porque sueño con que las sillas de Cristina Cifuentes y Esperanza Aguirre estén vacías o, al menos, en la oposición”.

Aguirre, por su parte, no acudió el lunes al segundo debate de precampaña en el Círculo. Mandó a su número dos, Íñigo Henríquez de Luna. En el de corrupción de marzo la remplazó Percival Manglano, número seis. Sus ausencias no pasan inadvertidas. Raquel López, de IU, bromeó: “Es una pena que Aguirre no esté aquí. Le apetece más sacar el sofá hinchable a Serrano que debatir”. Henríquez de Luna salió en su defensa: “Aguirre se ha comprometido a debatir face to face. Tanto miedo no tendrá”.

Los candidatos a la Comunidad se asombran. “Cristina Cifuentes tiene miedo a confrontar su opinión. Ni ella está convencida de cómo el PP ha gestionado y es incapaz de defenderlo”, opina Ramón Marcos, de UPyD. Para José Manuel López, de Podemos, es “una contradicción hablar de regeneración democrática y no participar en los debates en los que se intercambian propuestas. Parece que tienen miedo a que se les confronte en los temas de corrupción y en sus políticas de gestión de lo público, que nos han llevado a un enorme endeudamiento”. Ignacio Aguado, de Ciudadanos, por su parte, afirma: “Me parece una falta de respeto a los otros candidatos que hacen el esfuerzo en sus agendas y, sobre todo, a los ciudadanos que quieren escuchar”.

El socialista Ángel Gabilondo se muestra conciliador: “Yo agradezco que haya espacios donde se pueda debatir, hablar, contrastar ideas, programas y proyectos. Siempre que existan procuraré ir para decir lo que pienso”.