Cifuentes sufre el desplante de la comunidad sanitaria
La Asociación de Médicos negó la palabra a un enviado de la candidata del PP
Cristina Cifuentes, la candidata del PP en la Comunidad de Madrid, ha sufrido dos desplantes en los últimos días de las comunidades educativa y sanitaria, las más críticas con la gestión del PP. Los rectores de las universidades madrileñas se marcharon antes de que llegasen los medios para retratar su encuentro con ella celebrado la semana pasada y una asociación de facultativos negó ayer la palabra en un debate a un enviado de la aspirante popular.
La Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS), el mayor sindicato de la profesión en Madrid, negó ayer la posibilidad de debatir al consejero de Asuntos Sociales, Jesús Fermosel (PP), al que Cifuentes había mandado a un debate sobre la situación sanitaria con aspirantes de otros partidos. Fermosel, médico de profesión, no pudo participar porque no estaba “al mismo nivel” que el resto de aspirantes, según Julián Ezquerra, secretario general de la asociación: Ángel Gabilondo (PSOE), Luis García Montero (IU), Ramón Marcos (UPyD), José Manuel López (Podemos) e Ignacio Aguado (Ciudadanos). Cifuentes acudió a esa hora a un acto con la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención a la Mujer Prostituida (APRAM).
Fermosel, lejos de irse, se sentó a un lado de la mesa junto a Mercedes Gallizo, número cuatro del PSOE. Tras el debate, defendió la gestión sanitaria del PP. Los tribunales y las protestas de la marea blanca consiguieron en enero de 2014 que el presidente regional, Ignacio González, parase la privatización de la gestión de seis hospitales públicos. Su mayor fracaso con Eurovegas. AMYTS llegó a denunciar a González por acusarles de "matonismo y extorsión"en una entrevista televisada.
Este no es el primer mal trago que sufre Cifuentes en los últimos días. El día 17 se reunió con los rectores de las seis universidades públicas en un acto de campaña, que se ha repetido con los otros candidatos. Sin embargo, ninguno se fotografió con ella al terminar la reunión. El equipo de prensa de Cifuentes explicó que a última hora habían adelantado la cita y, por consiguiente, habían terminado antes el encuentro. De forma que cuando llegó la prensa, —20 minutos antes de la convocatoria—, ya no quedaba nadie.
Ni siquiera compareció con Cifuentes Fernando Suárez, rector de la Universidad Rey Juan Carlos y ahora presidente de la conferencia de rectores madrileños. Suárez actuaba de anfitrión, pues el encuentro tuvo lugar en la sede de su fundación en la capital. Fuentes universitarias aseguran que nadie les avisó de que iban a acudir los medios, por lo que niegan que se tratase de “un desplante” a Cifuentes como el que sí hicieron en mayo de 2012 al ministro José Ignacio Wert en el Consejo de Universidades. Wert se había negado a introducir en el orden del día el debate de los recortes educativos y los rectores acordaron no ir.
La imagen de Cifuentes, que posó e hizo declaraciones sola, era radicalmente contraria a la que antes logró en el Círculo de Bellas Artes el socialista Ángel Gabilondo, expresidente de los rectores. En este caso los cuatro rectores presentes —el de la Complutense, José Carrillo, en campaña electoral manda a las reuniones a representantes—se fotografiaron. Suárez, incluso, dijo unas palabras escoltado por sus colegas.
En esta legislatura, las tasas universitarias han subido un 66% en Madrid, las becas se han menguado de media 450 euros anuales y el recorte en el presupuesto ha dejado temblando a los campus que no han dejado de protestar por cada una de las medidas.
Cifuentes calificó ayer de “insólita” su exclusión del debate sanitario. Afirmó que la invitación le llegó a la Delegación del Gobierno, donde ya no trabaja desde hace dos semanas.
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