Urkullu plantea actualizar el Estatuto frente a la “revolución” de la ‘vía vasca’

El lehendakari prefiere la evolución a la revolución. Prefiere la negociación, la cesión y el compromiso antes que la imposición. Apuesta por la actualización del autogobierno, por avanzar en términos de mayor soberanía, validar el derecho a ser consultados, pero respetando los planteamientos y los plazos de la democracia. Urkullu ha respondido de esa manera a una interpelación de EH Bildu, que le pedía su opinión sobre la Vía vasca, Euskal Bidea, recientemente presentada en el Bec de Barakaldo y que propone avanzar hacia la independencia dando pasos unilaterales. "Eso es la revolución", ha respondido, "un camino hacia la inestabilidad y la incertidumbre".   

El portavoz de la izquierda abertzale, y secretario general de EH Bildu, Pello Urizar quería saber si el PNV está dispuesto a arrimar el hombro en ese proceso, y ha explicado desde la tribuna que la propuesta se asienta en 20 pasos para construir un país, una política fiscal, y un proyecto "sin injerencias exteriores. En nuestra propuesta no aceptamos las injerencias exteriores", ha dicho."La línea roja ha de ser la voluntad del pueblo vasco", ha dicho pero dejando muy claro que se trata de un camino que arranca con "una hoja en blanco" en el que la bilateralidad entre administraciones es una ecuación que no sirve.

La revolución sería que el PNV queme sus naves en defensa de este pueblo"

El lehendakari ha respondido que Euskadi tiene muchas páginas y lineas escritas ya como para empezar con un papel en blanco. Tras reconocer que sí es cierto que los partidos se enfrentan a un nuevo ciclo dista mucho de ser una hoja en blanco. "Su proyecto sí es una hoja en blanco, el nuestro se puede leer en numerosos documentos". Para el lehendakari "la desobediencia e insubordinación institucional que proponen es la revolución". "No compendo que usted ni su partido se embarquen en un camino que se adentra en la incertidumbre, esto no es la vía vasca sino la vía revolucionaria, un escenario de incertidumbre e inseguridad política y social para este país".

El debate se iba calentando poco a poco. Urizar subió por segunda vez a la tribuna y le quitó hierro al término revolucionario, incluso al de revolución como algo "que yo utilizo a diario". Pero a renglón seguido espetó a Urkullu: "Lo verdaderamente revolucionario sería que el PNV estuviera dispuesto a quemar sus naves en favor de este pueblo". Para la izquierda abertzale, el partido del lehendakari debiera hacer más uso del discurso que solo despliega una vez al año en las campas de Foronda, en el Alderdi Eguna.

"No es tiempo de unilateralidad", ha cerrado la interpelación el lehendakari. "Es tiempo de sentarse y de ceder todos, y después de acordar", ha dicho, macando la actualización del estatuto de Gernika como una asignatura pendiente por la que trabajan él y su partido.