Detenido el hermano policía de Bustos por pertenecer a una banda criminal
Joaquim Bustos, cabo de la policía local de Rubí, está acusado de dar información sobre empresas que luego eran asaltadas


Los Mossos d’Esquadra detuvieron a Joaquim Bustos, cabo de la policía local de Rubí y hermano del exalcalde de Sabadell, Manuel Bustos, acusado de dar información a una banda de expertos ladrones de empresas a los que se les acusa de perpetrar, al menos, 22 robos en compañías. Tras declarar, los agentes lo dejaron en libertad a la espera de que declare en el juzgado de guardia.
Joaquim Bustos fue detenido el pasado lunes y acusado de pertenencia a organización criminal, revelación de secreto y de romper la custodia de pruebas y documentos. Según fuentes cercanas al caso, Bustos aprovechaba, presuntamente, su condición de agente de la autoridad para ayudar a la organización y señalar las empresas a las que asaltar.
Tres de los asaltantes de la banda fueron detenidos a finales de septiembre acusados de robar en el interior de empresas utilizando la técnica del butrón. A los arrestados, tres hombres de entre 33 y 42 años de nacionalidad kosovar y vecinos de Santa Coloma de Gramenet, Barberà del Vallès y Salt, se les acusa de 22 robos perpetrados en diversas empresas localizadas en el Baix Llobregat, Vallès Oriental y Vallès Occidental. A los detenidos se les imputa los delitos de falsificación documental, robo de vehículos, robo con fuerza y organización criminal. Además de diversos objetos de valor, los arrestados robaron más de 100.000 euros en metálico.
A finales de 2013, los agentes de los Mossos d’Esquadra detectaron un incremento de los robos con fuerza perpetrados en empresas en las que siempre se acababa perforando la caja fuerte y sustrayendo el dinero que había en el interior. Los ladrones forzaban las cajas fuertes con hachas, una técnica que los agentes no habían visto anteriormente.
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La investigación policial comprobó que los asaltantes utilizaban comunicadores portátiles, inhibidores de alarmas, hachas, mazos ligeros siempre de una determinada marca comercial y otro tipo de herramientas como puntales, linternas y utensilios para agujerear paredes. Los agentes también comprobaron que la organización seleccionaba previamente las empresas e incluso visitaban los edificios para obtener información de los elementos de seguridad que posteriormente debían sortear para acceder a las empresas.
Los tres ladrones utilizaban un turismo, a nombre de una tercera persona, que siempre estaba estacionado en un lugar cercano a la autopista C-58. El modus operandi siempre era el mismo: subían al vehículo, iban a un bosque cercano donde se cambiaban de ropa y calzado y se dirigían al polígono industrial donde ya habían detectado la empresa que iban a asaltar. Antes de entrar en los edificios, uno o dos vehículos realizaban labores de contravigilancia en los perímetros de los polígonos industriales para evitar ser vistos. Tras el robo, volvían al bosque, ocultaban la ropa y el calzado de trabajo entre la vegetación y volvían a aparcar el vehículo con el que habían perpetrado el asalto.
El pasado 28 de diciembre, los Mossos d’Esquadra, con una orden del Juzgado de Instrucción número 3 de Martorell, realizaron cinco entradas y registros de domicilios situados en Cornellà de Llobregat, Santa Coloma de Gramenet, Barberà del Vallès, Sabadell y Salt y se procedió a la detención de tres miembros del grupo. También se localizaron diversas de las herramientas utilizadas para los asaltos y algunos de los objetos robados.
El juez instructor de la causa decretó el ingreso en prisión provisional de los tres detenidos y dictó una orden de busca y captura para dos miembros de la trama criminal. La investigación continuó abierta y el pasado lunes los agentes detuvieron al hermano del exalcalde de Sabadell, al que se le acusa de ser uno de los miembros de la organización.