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Laboral Kutxa, 100-Sevilla, 60

Laboral Kutxa apabulla a un apático Sevilla

El base americano Darius Adams debuta con el equipo baskonista

Iversdon y San Emeterio tratan de impedir la entrada del jugador del Sevilla Radicevic.
Iversdon y San Emeterio tratan de impedir la entrada del jugador del Sevilla Radicevic.david aguilar (efe)

El Laboral Kutxa despidió el año ante su afición con el sexto triunfo liguero, vapuleando sin contemplaciones (100-60) a un Baloncesto Sevilla que no le plantó batalla más allá de los dos primeros minutos de partido. Los andaluces nunca estuvieron en el duelo y los ocho puntos anotados en el tercer cuarto evidencian la nulas ganas que pusieron ante un Baskonia que pudo tener al fin una plácida tarde.

Darius Adams debutó como último fichaje azulgrana y compartió el timón con Mike James, en lo que va a ser a partir de ahora la pareja de bases vitoriana, tras la venta de Thomas Heurtel al Anadolu Efes turco. A Laboral Kutxa y Baloncesto Sevilla les costó encontrar el ritmo de partido y la fluidez en un arranque en el que los primeros puntos llegaron desde el tiro libre, en tres minutos.

Pudo mantenerse el cuadro local con los triples de Bertans, James y una docena de puntos del inspirado Shengelia que le dieron la primera gran ventaja, 28-16 al final del primer acto, ante un rival con las ideas poco claras en ataque.

Laboral Kutxa, 100-Sevilla, 60

Laboral Kutxa (28+26+23+23): Adams (10), Causeur (9), San Emeterio (16), Shengelia (16), Iverson (2)-cinco inicial-, Bertans (14), Tillie (5), Begic (9), Vujacic (5), James (10), I. Diop (4), M. Diop.

Baloncesto Sevilla (16+17+8+19): Woodside (5), Urtasun (4), Watts (3), Rodríguez (2), Hernangómez (9)-cinco inicial-, Porzingis (12), Radicevic (8), Thames (6), Byars (5), Balvin (6), Gallardo.

Arbitros: Jiménez, Peruga, Sánchez Mohedas. Eliminado Porzingis (m. 39).

Incidencias: Partido de la jornada 13 de la fase regular de la Liga Endesa disputado en el Buesa Arena de Vitoria ante 9.764 espectadores, según el club.

La entrada en cancha de San Emeterio y el debutante Adams disparó la renta en ocho minutos del segundo cuarto. Abrió la brecha hasta un 48-26 tras un 12-0 de parcial que destapó las carencias de los sevillanos en un mal día de Porzingis y Hernangómez menos brillantes que en citas pasadas.

Los 21 puntos de ventaja baskonista al descanso, 54-33, dejaron visto para sentencia el partido por la impotencia de un Sevilla que no tuvo el día en ataque y concedió además todo tipo de facilidades en defensa hasta recibir 54 puntos en veinte minutos.

No cambió la decoración tras el paso por los vestuarios. El Baskonia siguió aprovechando la endeblez de un rival que no compareció con ganas de pelea o al menos limpiar la imagen. Tardaron cinco minutos los andaluces en anotar su primera canasta del segundo tiempo y, para entonces el Baskonia, ya estaba a una sideral ventaja, 65-35.

La sequía ofensiva sevillana -dos puntos en siete minutos- fue demencial rayando la desidia impropia de un conjunto profesional de la Liga Endesa. Los de Ibon Navarro aprovecharon para darse un baño de autoestima en una temporada llena de sobresaltos y fueron acumulando puntos de ventaja, 77-41 minuto 30.

El último periodo ya fue una anécdota y no sirvió más que para el reparto de minutos entre los nuevos jugadores locales, en busca de su acoplamiento en el engranaje a la espera de contiendas más complicadas y exigentes. Incluso hubo tiempo para el debut liguero de Mamadou Diop, que compartió en cancha junto a su hermano Ilimane el último minuto y 37 segundos.

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