Cat Power enseña las uñas

En cierta ocasión, la cantautora estadounidense Chan Marshall confesó que, cuando era pequeña, su madre le decía que había nacido en el año del gato, en alusión a la canción, The year of the cat, de Al Stewart, que estaba muy de moda en el primer lustro de los setenta.

Cuando empezó a dedicarse a la música, se puso entonces el nombre artístico de Cat Power y así se dio a conocer a mediados de los noventa. Primero fueron canciones vigorosas —eran los años del grunge— para después abrazar sonidos más intimistas y minimalistas que la acercaban a eso que llaman alt folk.

A pesar de todo, no ha perdido fuerza y el domingo llega a Madrid para finalizar a su pequeña gira española que le ha tenido estos días en Barcelona y en Cartagena. Gira bastante tardía, teniendo en cuenta que todavía la excusa es su último disco, Sun, publicado hace dos años.

Pero hay ganas de verla. En esta ciudad no lo había dado a conocer en directo. Si no fallan los cálculos, no visitaba Madrid desde 2007, cuando presentó su magnífico the greatest en uno de los mejores discos de la última década, que no ha perdido un ápice de interés desde su publicación en 2006. Entonces actuó en Joy Eslava esta vez será en La Riviera.

Antes que ella, los escenarios madrileños acogen propuestas tan distintas como un tributo a Enrique Urquijo, que fuera líder de Los Secretos y de cuyo fallecimiento se cumplen ahora quince años, o la despedida de la gira de una auténtica diva a la española: Mónica Naranjo.

A Urquijo le cumplimentan lo mismo cantautores que rockeros, grupos que solistas, y en ese largo maratón de cariño a su recuerdo podrá verse, entre otros muchos a su hermano Álvaro con el resto de Los Secretos, a Pancho Varona, Marwán, Rebeca Jiménez, Leiva, Andrés Suarez o La Tercera República.

El indie español tiene en Neuman uno de sus valores últimos. El grupo murciano presenta IF, el disco que le ha dado popularidad y el trabajo que presumiblemente será el centro de su concierto en la Sala But el sábado.

Visita también la ciudad una estrella de la canción británica, James Blunt, al que le vino muy bien para darse a conocer eso de anunciar a los cuatros vientos que había servido en Bosnia como oficial del ejército de su país. Llega con 40 años al Teatro Circo Price, nueve después de You’re beautiful. Y unos reyes de la electrónica de los noventa, como fueron los belgas Front 242.