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Una muñeca en solitario

Sylvain Sylvain, superviviente de New York Dolls, recrea en Madrid el repertorio de la banda

Sylvain Sylvain en un concierto de New York Dolls en 2011.
Sylvain Sylvain en un concierto de New York Dolls en 2011.

Esta es también una historia de ropa. “Al arrancar los setenta, yo trabajaba en una tienda hippie que vendía, por ejemplo, vaqueros acampanados, a Janis Joplin. Enfrente había otra de reparación de juguetes, se llamaba El Hospital de las Muñecas de Nueva York. De ahí tomamos el nombre”. Sylvain Sylvain (El Cairo, 1951; Sylvain Mizrahi en la partida de nacimiento) viene a Madrid dispuesto a rememorar la música y milagros de un terremoto en la escena del rock neoyorquino de la época: New York Dolls. La banda de la que fue guitarra rítmica y alma musical a la sombra de personalidades más llamativas como David Johansen o, sobre todo, Johnny Thunders.

Vástago de una familia egipcia judía exiliada en la Gran Manzana (“mis antepasados eran sefardíes procedentes de España”) ofrece un repertorio mezcla de canciones y anécdotas este viernes en la sala Fun House. “No todas serán historias de sexo, drogas y rock ‘n’ roll, pero recuerdo que en Memphis actuamos, con Iggy Pop como telonero, y vino la brigada antivicio por nuestra fama de depravados. Iggy no paró de agarrarse las pelotas y demás rituales: no pasó nada. Pero bastó que David convocara al público sobre el escenario, una parte de nuestro show, para acabar la noche en comisaría”.

Esos cinco tipos travestidos en la portada de su debut de 1973, New York Dolls (disueltos después del segundo álbum, Too much too soon), allanaron la senda al punk. No solo en Estados Unidos, también en Inglaterra. Y con la moda de nuevo de por medio: “Conocí a Malcolm McLaren y a Vivienne Westwood [el mánager luego de los Sex Pistols y la diseñadora que les dio imagen] en una feria de boutiques en 1971. Esa noche les invité a ver tocar al grupo, y quedaron fascinados. Él incluso nos representó en nuestra recta final”.

Mis antepasados eran sefardíes procedentes de España

Sylvain Sylvain

Con Glen Matlock, el bajista primigenio de Sex Pistols, Sylvain ha compartido giras recientes como dúo. “Estuvieron muy bien, y me sirvieron para poner a prueba mi actual espectáculo en solitario. Aunque interactuar con el público ya lo practicaba de chaval. En una ocasión, a los 16, salí abucheado, algo que te puede llevar a querer ser dentista. Pero perseveré y aprendí que la clave es el entretenimiento”.

Sylvain va de nuevo por libre tras la reunión de los New York Dolls promovida una década atrás por Morrissey, fan irredento de las Muñecas: “Convenció a David Johansen, era él quien llevaba casi 20 años negándose: que si le faltaba tiempo, que si sus obligaciones contractuales…no me creo nada. Nuestra segunda etapa no ha significado un éxito financiero. Y David no entiende lo que es tocar con otros músicos. En su cabeza, trabajamos para él”.

Entre 2004 y 2011, con el cantante y Sylvain como únicos supervivientes, la banda ofreció grandes conciertos y tres apreciables trabajos de canciones nuevas (compuestas la mayoría por ambos): “Me gustan esos discos, pero deberían haber ido a nombre del David Johansen Group”, ironiza el guitarrista. Más detalles: “Todo fue bien hasta que él se empeñó en interpretar en vivo los temas nuevos, pese a que le dije que solo debíamos hacerlo si llegaban a ser hits. No me niego a crecer con la música, pero los contratos pedían a los New York Dolls, no otra cosa”.

Entre 2004 y 2011, tras 20 años separados, volvió su antiguo grupo

El reencuentro resultó al inicio desolador por la muerte del bajista del quinteto clásico, Arthur Kane, cuya historia de penurias recoge el documental New York Doll (2005). “Algo muy triste, él mismo ignoraba que padecía leucemia. Llevaba toda la vida anhelando aquel momento, y mira”. El óbito añadía negrura a un grupo asociado a la tragedia: la heroína marcó las existencias de los fallecidos Johnny Thunders y Jerry Nolan, sucesor este del primer batería, Billy Murcia, que murió a los 21 años tras una sobredosis en una gira inglesa previa al estreno en el estudio. “Billy era colombiano, de abuelos españoles. Ensayábamos en el sótano de su madre. A Johnny lo incorporamos en el instituto porque siempre estaba rodeado de chicas, aunque no sabía tocar. Me preguntó cuántas cuerdas tenía la guitarra. Le dije que seis. ‘¿Y el bajo?’ ‘Cuatro’, contesté. ‘Soy vuestro bajista’, me soltó. Luego se convirtió en un guitarrista intransferible. Y en un compositor enorme”.

Uno de los modelos a las seis cuerdas para Sylvain fue Mick Taylor. “Le vi actuar antes de que perteneciera a los Rolling Stones y no paraba de imitarle ante el espejo”. Jagger, Richards y compañía siempre entusiasmaron a los New York Dolls. Igual que los pioneros del rock ‘n’ roll y los grupos de chicas sesenteros. El concierto de Sylvain incluirá, además de piezas de los dos discos gloriosos de las Muñecas y otras suyas como solista, versiones inspiradoras. Entre ellas, el Pills de Bo Diddley que grabó con New York Dolls. “Acudimos todos una vez a verle tocar en Long Island y la reclamamos a voz en grito: “¡Pills, pills!” (¡pastillas, pastillas!). No debía recordarla, porque logró que la seguridad nos desalojara por intentar, según él, vender drogas”.

Sylvain Sylvain este viernes en Fun House Music Bar (Calle Palafox, 8), 21:30. Entrada, 12 euros

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