_
_
_
_
Crónica
Texto informativo con interpretación

The National y los subalternos

Mando Diao y The Kooks propiciaron ratos amenos, pero el magisterio del temperamental Matt Berninger lo eclipsa todo

Bonita idea para el otoño la de pasar ocho horas de música a buen recaudo, como esas 9.000 personas que casi llenaban el Barclaycard Center este viernes. Pero el festival no fue en puridad tal cosa, sino un concierto (asombroso) de The National con una privilegiada retahíla de subalternos a modo de teloneros. The Orwells se encontraron el pabellón medio vacío y parecieron más destemplados que furibundos, pero Mando Diao y The Kooks siguen constituyendo alternativas amenas. Incluso aunque, en ambos casos, sus recientes discos rocen la condición de fiasco. Los primeros, gimnásticos y descamisados, porque son bailables, desprejuiciados, fogosos. Y Luke Pritchard, eterno jovencito, por su facilidad para enhebrar estribillos sexys (y facilones).

Todas esas consideraciones empalidecen ante la imponente presencia de Matt Berninger y sus huestes, hombre atribulado que reinventa sus canciones cada vez que las aborda. Ese caballero de negro que vaga por las tablas cual fiera enjaulada, abraza el micrófono y lo golpea con furia posesa; el barbudo absorto que nos apuñala con versos desolados y letanías sin piedad; ese barítono que a ratos se desgañita constituye una de las experiencias escénicas más embriagadoras que ahora mismo pueden acontecer. Era estimulante advertir el gesto de excitación entre ese sector de la chavalería que quizás conociera mejor el repertorio de The Kooks que el de Trouble will find me. Pero escuchar el martilleo de Squalor Victoria o ese Vanderlyle crybaby geeks sin amplificación le cambia la perspectiva a cualquiera.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_