La génesis del toreo en Alicante

Una carta de pago de 1726, por la que Bautista Galant abonaba  noventa y siete libras y diez sueldos, el coste de 16 toros que se corrieron en la Plaza del Mar de Alicante, es el primer documento relacionado con el mundo taurino que se conserva en el Archivo Histórico Provincial de Alicante que ha recuperado de sus fondos todo el material relacionado con el origen de la tauromaquia. 

Coincidiendo con la fiesta de Fogueres se acaba de inaugurar la exposición La fiesta de los toros. Fondos del Archivo Histórico Provincial que se divide en cuatro bloques y que se podrá visitar hasta el mes de septiembre. El primero incluye el fondo histórico, en el que destaca el cartel más antiguo que se conserva, de 1925, y un importante número de expedientes sobre autorizaciones de espectáculos taurinos de Gobierno Civil, entre 1940 y 1983.

El segundo bloque aborda el toreo alicantino con carteles que recogen algunas de las corridas más destacadas, desde la primera plaza, que se construyó en 1847 en el Raval de San Antón, hasta la actual con su primer festejo, con una terna integrada por los matadores Guerrita, Lagartijo y Lagartija.

Las sagas de diestros alicantinos cobran un especial protagonismo en la tercera parte de la exposición que se detiene, especialmente, en las sagas de los Esplá y los Manzanares. La exposición finaliza con un apartado dedicado a la mujer y  su difícil relación el con mundo del toro. Aunque la fecha clave en la historia taurina de la mujer es el año 1974, tras la batalla ganada en los tribunales por la torera alicantina Ángela Hernández, la colección de carteles del Archivo Histórico recoge una larga lista de toreras, novilleras, picadoras, rejoneadoras y hasta ganaderas recorriendo las plazas de la provincia, desde 1957 hasta 1983.

Por último, se repasa la gran cantidad de novilladas y becerradas que se celebraron en torno a la década de los años setenta en muchas de las localidades de la provincia de Alicante coincidiendo con sus fiestas patronales gracias a la instalación de plazas móviles metálicas y el elevado número de corridas benéficas que se celebraron. La exposición es un viaje por el tiempo a la génesis del toreo en Alicante.