La Xunta dedica un millón de euros a ayudar a pagar la luz de 14.000 familias

El Gobierno gallego prepara un “tique social” para ayudar a las familias con hijos menores de edad y en situación de vulnerabilidad a pagar el recibo de la luz. La medida fue presentada ayer en el Consello de la Xunta en un informe al que el presidente, Alberto Núñez Feijóo, dio el visto bueno. El departamento de Industria destinará un millón de euros en este ejercicio para rebajar la factura energética de 14.000 familias gallegas. La mayoría de los hogares recibirán un bono (semestral) de 90 euros y en el caso de las familias numerosas la ayuda llega hasta los 120 euros. Podrán acceder a esta ayuda los hogares con hijos menores de edad e ingresos por debajo del Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM) que en 2014 está fijado en 532,51 euros mensuales.

Según explicó el presidente, las solicitudes podrán tramitarse a través de los servicios sociales de los ayuntamientos y también en la web del Instituto Enerxético de Galicia. Feijóo explicó que el plan tiene un año de duración —a la espera de ver cómo evoluciona la economía— y defendió que, unido a las medidas aprobadas por el Gobierno central, contribuirá a rebajar la factura de la luz en los hogares más vulnerables hasta en un 40%. “La estimación que hemos hecho es de un millón de euros pero se trata de una partida ampliable”, aseguró tras la reunión de su Ejecutivo.

La Consellería de Traballo anticipó también una nueva medida del plan de empleo juvenil para otorgar subvenciones a jóvenes desempleados que se conviertan en autónomos. Está pensada para menores de 30 años y primará los puestos de trabajo que se creen en las provincias de Lugo y Ourense, que incrementarán las ayudas en un 10%. Las subvenciones oscilarán entre 1.400 y 12.600 euros a cada trabajador por cuenta propia y habrá distintas líneas de ayudas: para facilitar los ingresos durante el inicio de la actividad, para reducir los tipos de interés de los préstamos y para que puedan establecerse como trabajadores autónomos o por cuenta propia. El montante global de este proyecto suma 4,5 millones de euros y pretende beneficiar a 1.500 jóvenes menores de 30 años que estén en el paro.

La reunión semanal del Gobierno autónomo sirvió también para aprobar la construcción de un centro de salud en Marín, un convenio con la Federación Galega de Comercio por 459.000 euros e incluso dio para anunciar que el Sergas centralizará la compra de un medicamento, el Interferon-Beta, con el que se trata la esclerosis múltiple, lo que supondrá un ahorro de 420.000 euros para las arcas autonómicas en los próximos tres años.

El Consello volvió a despachar numerosos informes sobre los temas más variados. Uno de ellos desgranó la evolución de los pagos de la comunidad autónoma durante lo que va de año. Esos datos de tesorería llevaron al presidente a decir que Galicia es “una de las comunidades más solventes de España” y “la única que no tuvo que acceder a los fondos de liquidez” puestos en marcha por el Gobierno de Mariano Rajoy. El estado de la tesorería que detalla la Consellería de Facenda establece que la Xunta tarda una media de 20,3 días en pagar a sus proveedores. “Superamos ya el objetivo de 30 días que teníamos para este año”, alegó Feijóo, quien admitió, no obstante, en un cálculo aproximado, que aún quedan algunos albaranes de mayo de 2013 sin atender. Facenda destaca que hasta el 15 de mayo del presente ejercicio abonó 2.711 millones de euros en 63.264 pagos de la Administración y el Sergas. La Consellería de Traballo que preside Beatriz Mato también diseñó el calendario laboral de 2015 que moverá algunos de los festivos “para que afecten lo menos posible a la productividad” de las empresas, según insistió Feijóo. La idea es evitar los puentes. De los 14 festivos (dos de ellos son locales y competen a los ayuntamientos) la Xunta mantiene los tres que tiene potestad de variar, pero que nunca ha tocado (el día de Reyes, Jueves Santo y el 25 de julio). Pero sí ejerce sus competencias para modificar los que coinciden en domingo. El 1 de noviembre, festividad de Todos los Santos, pasa al día 2, que es lunes. Y el 6 de diciembre, también domingo, se traslada al 20 de marzo (viernes) posponiéndose un día la celebración de San José (el 19 cae en jueves) para evitar el puente.