Un niño de seis años muere en un incendio en una vivienda en Sevilla
Dos hermanos de la víctima, de uno y 14 años, se encuentran en estado grave tras el siniestro
Un niño de seis años ha fallecido en la madrugada del martes en el incendio registrado en una vivienda de Dos Hermanas (Sevilla). Dos hermanos del menor, de uno y 14 años, han resultado heridos y permanecen ingresados en estado grave en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. La madre, de 36 años, sufrió quemaduras en la cara y ha sido dada de alta esta tarde. Según fuentes de la investigación, el fuego se originó en la habitación en la que dormían el fallecido y su hermano de 14 años. La Policía Científica investiga las causas del incendio, aunque todo apunta a que podría tratarse de un cortocircuito.
Según relatan los vecinos, el fuego se originó sobre las 1.30. “Me iba a acostar cuando escuché que gritaban ‘fuego, fuego”, aseguraba este martes Sonia Muñoz, vecina de la barriada, mientras miraba hacia la ventana del dormitorio de los menores. “Las llamas eran impresionantes”, recordaba. La reja calcinada así lo constata. El incendio se produjo en la tercera planta de un bloque de viviendas ubicado en Los Montecillos, una barriada obrera de Dos Hermanas. Y solo ha afectado a la casa de la familia, en alquiler social. El olor a quemado inunda hoy unas escaleras en cuyas paredes se podía leer todo tipo de pintadas.
El chico de 14 años logró salir de la vivienda antes de que la policía llegara al edificio, y fue trasladado al hospital por un vecino. Según fuentes sanitarias, presenta quemaduras en el 60% de su cuerpo. En cuanto a la pequeña de 13 meses, que dormía en el dormitorio de la madre, los agentes la encontraron en parada cardiorrespiratorio por inhalación de humo. “La madre tenía quemaduras en la cara y solo gritaba que en la casa aún estaba su hijo pequeño. Nada más salir a la calle, se desmayó”, recuerdan varios vecinos. “Se vivieron momentos de mucha tensión, sobre todo ante la incertidumbre de si quedaba alguien más dentro de la casa”, añade Sonia Muñoz.
Los vecinos fueron los primeros en intentar sofocar el fuego. “Nos mojábamos la cara y la ropa e intentábamos entrar en la casa, pero no se podía dar ni tres pasos, te ahogabas”, explica Antonio, uno de los residentes que intentó ayudar a la familia. Al dolor se sumó la indignación. “Los bomberos tardaron en llegar al menos media hora”, critica Pedro Espinar, opinión compartida por el resto de vecinos. Según el teniente de alcalde y delegado de Movilidad y Prevención, Antonio Morán, los bomberos tardaron en llegar a la zona cinco minutos. “El 112 dio el aviso a las 1.54 y a las 1.59 ya estaban en la zona”, explica. El menor de seis años será enterrado este miércoles.
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