Ana Miranda: “El bipartidismo armónico de PP y PSOE dejó tirada a Galicia”

Los eurodiputados del PP la llamaban La Pura porque viajaba en clase turista. Ana Miranda (Cuntis, 1971), la candidata del BNG que opta a ocupar de nuevo un escaño en la Eurocámara, es experta en derecho europeo y lleva explorando el laberinto de Bruselas desde 1999, cuando entró en el equipo de Camilo Nogueira. Cuenta que lleva años presenciando cómo populares y socialistas se alían en las grandes cuestiones, plegándose a los intereses de los lobbies y las multinacionales: “La defensa de los intereses gallegos siempre la hizo el BNG, siempre hemos estado ahí dando la cara”.

Pregunta. ¿Percibe usted, como dicen las encuestas, que el domingo se batirá el récord histórico de abstención?

Respuesta. Hay un gran interés de los grandes de partidos de que la haya, sobre todo del PP, que no quiere que la ciudadanía le dé un palo a sus políticas. Hay interés en silenciar la campaña. La lista del PP la encabeza Francisco Millán Mon, una persona prácticamente ausente de la Eurocámara en iniciativas por Galicia. Las opciones son votar contra los recortes y la corrupción o quedar en casa y dejarles barra libre.

P. ¿Por qué cree que los descontentos con el PP pueden caer en esa trampa?

R. El PP le ha hecho mucho mal a la política con mayúsculas. No solo él, sino ese bipartidismo armónico y españolista que forma con el PSOE y que acaba dando a los problemas las mismas soluciones. Hicieron creer a los ciudadanos que todos los políticos son iguales y no es así. El PP trata de desmotivar y sacarle la esperanza a la gente. La mayoría de los ciudadanos están pensando en llegar a fin de mes. Nosotros les decimos que sí hay esperanza y tiempo para pasar de la economía especulativa a la productiva e invertir en lo público.

P. Tiene una amplia experiencia en las instituciones comunitarias. ¿Son tan inútiles como piensan los ciudadanos?

R. No, el PP y los demás le hacen creer eso a la ciudadanía. La UE es profundamente antidemocrática pero el Parlamento, la única institución que elegimos, tiene más competencias que nunca. El problema es que deciden los tres —Comisión Europea, el Consejo y el Parlamento— y cuando se toman las decisiones consensuadas, si la postura de la Eurocámara es progresista siempre la tumban. Y las que no son progresistas son producto de la influencia de los lobbies y multinacionales y de un reparto de poder de ese bipartidismo también europeo del PP y del PSOE, que votan más del 70% de las veces juntos.

P. ¿Ha visto alguna vez que se le diera la vuelta a ese bloqueo?

R. Sí, muchas. Hubo momentos en los que salieron adelante medidas que llegaron a los ciudadanos, como el fondo europeo de ayuda a los más desfavorecidos o la inclusión del criterio demográfico en los futuros fondos europeos. El problema es que las grandes decisiones comunitarias las está tomando la troika. Ahora hay una suplantación democrática de las instituciones europeas, que ya vienen con una deriva antidemocrática desde Maastricht.

P. ¿Y esos lobbies tan poderosos no pueden también condicionar a los partidos de izquierda?

R. A nosotros no nos presiona nadie. La única influencia es la del pueblo gallego, es nuestro lobby. Gracias a nuestro grupo, Verdes-ALE [Alianza Libre Europea], se creó un registro de lobbies; antes campaban a sus anchas.

P. La izquierda se presenta fragmentada. ¿Habrá luego voluntad de colaborar?

R. La alianza de nacionalistas, de grupos verdes, de la izquierda en general, porque nosotros somos izquierda, ya está hecha, no hay nada que inventar. Ya la hicimos en esta legislatura y ya la hizo Camilo Nogueira [primer eurodiputado del BNG]. Siempre hay voluntad. Tenemos una amplia experiencia de trabajar con otros grupos por un fin social, por un fin solidario, por hacer una política humanizada, llevamos haciéndolo desde 1999. Pero siempre defendiendo los intereses gallegos. Hubo una posibilidad en esta legislatura de incluir Vigo en las redes transeuropeas de transporte y les mandé una carta a PP y PSOE para trabajar juntos, pero ni me respondieron. Sí me respondieron las eurodiputadas del Bloco [el luso Bloco de Esquerda] o uno de mis eurodiputados verdes. No siempre por venir del mismo lugar se construyen esas alianzas.

P. Geográficamente, pero me refiero ideológicamente.

R. Ideológicamente ya funciona. No es una novedad.

P. ¿Y cómo se compagina esa alianza ideológica con los intereses geográficos dispares?

R. Pues a veces no se hace por ideología. Puede haber un eurodiputado bretón del PP en la comisión de pesca con el que se negocia mejor que con Millán Mon [candidato del PP]. En materia agraria, se puede poner de acuerdo una diputada letona de derechas con José Bové [candidato francés de Verdes-ALE]. Ahí juega más la perspectiva de país. La votación por grupos parlamentarios funciona pero también las alianzas puntuales en ciertos temas. Nuestra prioridad es Galicia.

P. ¿Cómo describe el papel del PP en la Eurocámara?

R. Dejó tirada a Galicia.

P. ¿Y el del PSOE?

R. Lo mismo. La situación de las rías lo demuestra. Gobiernen unos o gobiernen otros las tenemos sin limpiar. PP y PSOE se aliaron para frenar un informe crítico en la Eurocámara mientras nuestras diputadas de Verdes-ALE [una letona y otra austriaca] se comportaron como gallegas.

P. ¿Los 20.000 millones de euros de ayudas recibidas fueron una oportunidad perdida?

R. Sí, sin duda.

P. ¿No hay responsabilidad gallega?

R. Por supuesto. El PP en la gestión de los fondos europeos demostró falta de transparencia y eficacia y también centralismo.

P. Esos fondos los manejaron todos los partidos en distintas Administraciones, el BNG también.

R. Los años en los que se hizo el reparto plurianual siempre coincidió con el PP en el gobierno. Otra cosa es que las Administraciones tengan que ejecutarlos pero decidieron el PP y el PSOE en el Gobierno estatal. El que distribuye es Madrid, por eso pedimos que se haga en Galicia.

P. BNG y AGE se disputan el voto del desencanto. ¿Qué les diferencia a ustedes de ellos?

R. El BNG se presenta para seguir defendiendo los intereses gallegos. Tenemos una experiencia, una lealtad con el país. No competimos con nadie, nos presentamos para hacer ver que la defensa de los intereses gallegos siempre la hizo el BNG, siempre hemos estado ahí dando la cara.