Las asociaciones de artes visuales critican el concurso del IVAM
Parte del comité de expertos está fuera de la modernidad, denuncian críticos y artistas
Una parte importante de los designados para formar parte del jurado que seleccionará el próximo director o directora del Institut Valencià d'Art Modern (IVAM) "tienen su especialidad y carrera profesional fuera del ámbito de la modernidad en arte, siendo más bien estudiosos del barroco, del renacimiento, etc". Así se expresan la Associació Valenciana de Crítics d'Art (AVCA) y Artistes Visuals de Valencia, Alicante y Castellón (AVVAC) en un manifiesto donde critican el concurso y la composición del jurado bajo el título El IVAM: Un instituto olvidado y un modelo de concurso.
"Este modelo institucional que prefiguran, practican y promueven", continúa el manifiesto, en referencia a buena parte de los miembros del comité de selección, "responde a una etapa anterior al paradigma contemporáneo y tecnológico". Las asociaciones explican su preocupación por los planteamientos y el desarrollo del concurso público abierto por la Consejería de Cultura para la designación del nuevo director o directora del IVAM.
A críticos y artistas sorprende "profundamente la no inclusión de expertos propios a estos niveles institucionales, más cercanos a la creación y al debate contemporáneos" y el hecho de que no esté representada "ninguna profesión de reciente incorporación en una institución de estas características".
En el escrito expresan en especial dudas "sobre la independencia e imparcialidad de dos miembros del comité: Tomás Llorens y Felipe Garín". En la misma línea, apuntan que los miembros del comité de expertos que "deberían tener una mirada objetiva e imparcial, como así lo trasladamos en la reunión mantenida con la consejera de Cultura". Y manifiestan sorpresa por "la no inclusión de expertos propios a estos niveles institucionales, más cercanos a la creación y al debate contemporáneos".
Les sorprende, asimismo, la ausencia de "al menos algún artista" en el órgano evaluador. "Cualquier artista que ostente el Premio Nacional de Artes Plásticas podría haber sido convocado para participar en las estructuras de legitimación del arte, puesto que integran una de las partes más importantes del propio sistema", han indicado.
El final es contundente, al subrayar "el malestar por el modelo institucional que deja entrever este patrón obsoleto" y advertir que "la composición del jurado desvela el interés tácito y parcial por arrinconar al arte contemporáneo".
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