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La Audiencia ordena reabrir el caso de un joven que perdió un ojo por pelotazo

El juez cree que hay indicios para imputar a un sargento, un cabo y un escopetero de los Mossos Stop Bales de Goma acusa a la policía catalana de falta de colaboración

Rebeca Carranco
Nicola Tanno, en su comparerencia  en el Parlament ante la comisión que estudió la prohibición de las pelotas de goma.
Nicola Tanno, en su comparerencia en el Parlament ante la comisión que estudió la prohibición de las pelotas de goma.MASSIMILIANO MINOCRI

El juez instructor no tuvo demasiadas dudas: el joven Nicola Tanno perdió un ojo cuando celebraba en Barcelona la final de la Copa del Mundo de España, en 2010, cuando él tenía 24 años, fruto de un pelotazo de los Mossos d’Esquadra. “Cruzó la Gran Via, caminando tranquilamente, y cuando estaba a punto de alcanzar la acera situada frente al bar Mas Frankfurt, en el número 347, recibió un fuerte impacto de una pelota de goma, que había sido lanzada por un agente de los Mossos d’Esquadra escopetero”, afirmó el juez. Pero como no pudo “determinarse” qué agente lo hizo, ni si actuó aplicando debidamente los protocolos, por orden de sus superiores, o de forma negligente, el titular del juzgado de instrucción 27, Xavier Paulí, decidió archivar la causa en julio de 2013.

Pero la Audiencia ha revocado su decisión. En un auto, hecho público ayer, la sección 21 considera que el caso de Tanno, que perdió el ojo derecho, “podría tratarse de un delito de lesiones imprudentes”. Y considera que hay “motivos suficientes para continuar con la causa” y volver a imputar a un cabo y un sargento, a los que suma ahora a un escopetero. Contra los dos primeros, porque entiende la Audiencia que eran los responsables de la furgoneta que estaba en la zona. Y el escopetero porque declaró durante la instrucción que efectuó tres disparos de pelotas de goma en Gran Via, en el triángulo con la calle Bordeta.  

Por todo ello, la Audiencia acepta el recurso presentado por Tanno. Y eso supone que se practiquen nuevas diligencias destinadas a aclarar quién disparó al joven. El juzgado deberá tomar declaración a los cabos y a los conductores de los de las furgonetas —las Dragó 201 y 201—, ordenar que se realice una pericial que fije la distancia entre el lugar en el que Tanno recibió el impacto y el en el que estaban los agentes, y solicitar las grabaciones de los desplazamientos de las unidades y las autorizaciones de disparo. Sobre esta última, la Audiencia considera que es “plenamente pertinente, necesaria y útil”. Las declaraciones de los Mossos fueron contradictorias, en cuanto en cuanto al número de pelotas disparados y los lugares concretos en los que intervinieron, según el tribunal.

“Los indicios racionales de criminalidad para continuar con la investigación de los hechos denunciados existen”, concluye el auto. La asociación Stop Bales de Goma, de la que Tanno es portavoz, celebró ayer la decisión de la Audiencia, y criticó la actitud de la policía. “Es inaceptable la falta de colaboración de los Mossos d’Esquadra en reconocer su responsabilidad y colaborar en la solución del caso”, lamentó la entidad.

Nicola Tanno tenía 24 años cuando recibió un pelotazo que le cambió su vida. De origen italiano, estaba en Barcelona estudiando un máster en Gestión de la Inmigración. Aquella noche del 11 de julio de 2010 vio la final España-Holanda en su casa. Cuando acabó, decidió acercarse a la plaza de España, donde se estaba festejando el triunfo de La Roja. Pero como a veces ocurre en este tipo de celebraciones, hubo un momento en el que el jolgorio degeneró en altercados. Tanno recibió un pelotazo cuando corrió a refugiarse en una zona de terrazas.

A raíz de la lesión, Tanno se convirtió en un activista en lucha para la prohibición de este tipo de material. Como portavoz de la asociación Stop Bales de Goma, acudió al Parlament en la comisión de estudio sobre modelo de orden público, y allí enseñó a todos los diputados los efectos de un pelotazo. “Esto también es violencia. ¿O no?”, les preguntó, levantándose las gafas. “Habrá personas que tendrán daños para toda la vida. ¿Para ustedes es un problema que los responsables de esos daños no estén identificados?”, les espetó. Las pelotas estarán prohibidas a partir del 30 de abril por orden del Departamento de Interior.

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Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

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