El soul mágico de Blueperro

El baterista Coke Santos y el teclista y organista Luca Frasca, son acompañantes habituales de Mastretta y El Show de Dodó. Los dos se juntan con el contrabajista Héctor Rojo, que a su vez forma parte de la banda que secunda a Jairo Zavala en Depedro, con el guitarrista Vicent Huma y el cantante Pipo Rodríguez para formar uno de los quintetos más interesantes que se pueden encontrar por los garitos de Madrid: Blueperro.

Puede decirse que hacen una suerte de soul, mezclado con rythmn and blues y rock americano, pero sería reducirlo demasiado. En realidad, es todo eso y más, pero tiene un punto de locura y magia (acaso por la influencia de Mastretta y Marina Sorín, del Show de Dodó) que les hace únicos y muy originales. Música que sirve también para soñar y que se aparta de convencionalismos y etiquetas y que ha cristalizado en su segundo disco, Just People que presentan esta noche en el café Berlín.

En el mismo lugar, mañana defiende también disco nuevo Calima, una formación que explora en las raíces gitanas y aflamencadas para hacer su evocadora música. Lumbre… canciones de carromato se titula, y es un homenaje a los artistas nómadas que llevaban su música de aquí para allá, cantando y tocando en la calle, buscándose cada día la vida en un ambiente de creación y bohemia. Hay en Calima algo del espíritu de Ojos de Brujo, pues no en vano de su disolución proceden, lo mismo que de las cenizas de Elbicho, surge Miguel Campello que fue quizá su motor principal. Campello también está de estreno de disco en solitario mañana.

Y cumplen ahora medio siglo de existencia los jamaicanos The Skatalites, una de las bandas pioneras, por no decir inventora, del ska, el ritmo sincopado y saltarín que luego derivó en el reggae. No están todos los miembros de la formación original, pero el espíritu sigue vivo y ofrecen sudorosas y divertidas sesiones de rocksteady, ska, mento y reggae con mucha pasión e intensidad. Claro que a intensidad ruidosa no hay nada como el rock metalero que esta fin de semana lo traen una veterana banda danesa D-A-D, y otra más reciente valenciana, Gigatrón.

El jazz suena gracias al saxofonista vasco Víctor de Diego, que hoy descarga en Bogui, y al canario Juan Belda que, hoy también, presenta en el Círculo, y con su grupo Bit Band, su disco La rueda infinita de Hans. La música deconstruida y más abstracta pasa por la electrónica de Electroputas, un grupo que a pesar de lo llamativo de su nombre y la imagen potente de la que hacen gala, no se come a nadie. Pero es la suya una apuesta atrevida y peculiar, con un juego escénico que pasa por mezclar partes pregrabas, pasajes añejos y crear sonidos en el momento en una suerte de orgía entre Djs, músicos, cantante vistosa y mucho groove.

El punk garajero suena mañana en el Siroco gracias a los también veteranos The Lord of The Altamont, aunque la propuesta más extraña de este fin de semana viene de esa unión, casi contra natura, que ha juntado cantantes femeninas bien distintas bajo la denominación común de Señoritas On Fire. La cantautora Esmeralda Grao, junto a Natalia Vergara, Sonia Delgado y María Villalón son las valedoras de este mega grupo que quiere poner la música pop con cierta raíz española en clave de reconocimiento internacional, no en vano alguna de ellas reside, o pasa largas temporadas en Londres. Actúan mañana a beneficio de Aldeas Infantiles, e invitan para la ocasión a rockeras como Aurora Beltrán (Tahúres Zurdos) o Cristina Narea (Sabina, Miguel Ríos, Aute), o cantantes melódicas como Cristina del Valle (Amistades Peligrosas).