La Generalitat prepara una propuesta para captar el apoyo del PSC a BCN World

El Gobierno catalán prepara una propuesta a medida del PSC para intentar que el grupo socialista apoye la ley que debe desencallar la construcción del macrocomplejo de juegos, hoteles y comercios BCN World de Tarragona. El Ejecutivo intenta sacar adelante la Ley del Centro Recreativo y Turístico de Vila-seca y Salou con el apoyo de un partido y quiere, por el momento, que el compañero de viaje sea el grupo socialista, pese a que el Partido Popular está también cerca de sus posiciones. Dos delegaciones de ambas partes se reunieron ayer el Parlament durante casi cuatro horas con el objetivo de desbloquear los dos grandes escollos que los separan: la rebaja del tributo sobre el juego y las directrices urbanísticas que deben marcar la edificabilidad del recinto.

Tras las reuniones de la ponencia de la ley, el PSC ha marcado como límite para acceder a dar su visto bueno a la normativa un 25% en el tributo sobre el juego, un gravamen muy alejado del 10% establecido por el promotor Veremonte y asumido por el Gobierno catalán. Según explicó ayer el diputado nacionalista Albert Batet, CiU está dispuesta a buscar fórmulas que complementen la tasa ofertada inicialmente pero considera que ese porcentaje "es una parte esencial para que [los nuevos casinos de Tarragona] sean competitivos", por lo que la considera una "línea roja" de la negociación.

Pese a ese discurso, en el Gobierno de Artur Mas se mantiene una postura posibilista respecto al acuerdo, si bien ayer se negaron a ofrecer detalles de por donde puede ir su nueva propuesta, que el PSC tendrá que analizar el fin de semana, antes de la nueva reunión prevista, convocada para el mediodía del lunes. Cuando Madrid competía por atraer la inversión de Eurovegas, el Gobierno de la Comunidad accedió por ejemplo a rebajar la tasa del juego al 10% pero con la posibilidad de reducirla hasta el 1% gracias a bonificaciones y deducciones a los promotores.

La reunión que mantuvieron en el Parlament fue movida. Por el lado de la Generalitat estaban presentes Batet; el director del Incasòl Damià Calvet --hombre fuerte de las negociaciones--, y la directora general de Tributos y Juegos de la Generalitat, Elsa Artadi. Por el del grupo socialista, los representantes fueron los diputados Xavier Sabaté, Jordi Terrades y Alicia Romero. En paralelo, y antes de ese encuentro, el presidente Artur Mas se reunió con el líder socialista, Pere Navarro.

"Para continuar avanzando hemos intercambiado papeles nuevos que analizaremos el fin de semana", explicó Xavier Sabaté al final de la reunión, resaltando "la voluntad de diálogo" del PSC, cuyos alcaldes de tarragona presionan a favor del acuerdo. Sabaté indicó que "procuraremos cerrar el lunes o el martes" un acuerdo.

CiU necesita el apoyo del PSC o del PP o la abstención de ambos para tirar adelante el proyecto, conocida la oposición frontal que ha mostrado hasta ahora ERC, que no ve con buenos ojos ni la rebaja fiscal que se ofrece a los casinos ni un techo edificable que escape al control del Parlamento.