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La dirección del PSOE ratifica la limpieza de las primarias tras las quejas de Gaspar

Puig busca “una victoria contundente” y el alcalde de Faura confía en dar la sorpresa

El reglamento “prevé con claridad la posibilidad de que las candidaturas tengan apoderados en cada mesa para garantizar la calidad del proceso” y “tanto la Comisión de Garantías Electorales Nacional como el Comité Organizador han actuado siempre con total imparcialidad, garantizando la igualdad de condiciones para ambos candidatos”. La Secretaría de Organización del PSOE salió así al paso este viernes de las quejas de Toni Gaspar, uno de los aspirantes en las primarias a la presidencia de la Generalitat que mañana celebrarán los socialistas valencianos. En una comparecencia ante los periodistas, Gaspar pidió que “observadores de la dirección federal” del PSOE garanticen “el carácter ejemplar y la igualdad de condiciones”. La respuesta de la Secretaría de Organización fue ratificar la limpieza del proceso.

El alcalde de Faura se quejó de que no dispone del censo de votantes, que se acerca a los 68.000 electores, mientras su rival, Ximo Puig, que es secretario general del PSPV-PSOE, envió cartas personalizadas a militantes invitando a su acto de cierre de campaña, previsto la noche del viernes en Valencia. También sostuvo que en Morella, donde Puig fue alcalde, “se ha pagado fuera de plazo y se ha fichado a todos los electores a la vez”, en referencia a que cada ciudadano que se apunta para votar el domingo hace una aportación individual de dos euros para gastos de organización de las primarias. El equipo de Puig mostró el resguardo de la transferencia a la cuenta de las primarias de poco más de 1.000 euros de la agrupación de Morella, fechada el pasado 3 de marzo, para rebatir la acusación. En Morella, donde fue alcalde Puig, 520 ciudadanos se han sumado a los 81 afiliados para participar en las primarias. En Faura, la localidad donde es alcalde Gaspar, han sido 518 los ciudadanos que se han incorporado al censo junto a 34 afiliados.

“Tengo 30.000 papeletas mías y todavía no me han dicho cómo hacerlas llegar a los electores”, señaló también Gaspar, que criticó los “privilegios en el conocimiento del censo” del equipo del secretario general. "Se ha desentendido", dijo Gaspar de la Comisión de Garantías, encargada de velar por el proceso, aunque no quiso criticar directamente a su presidente, el diputado Rafael Rubio. El candidato consideró irregular la fórmula de lo que denominó “urnas itinerantes”, con la que se pretende enviar precintadas las urnas de agrupaciones pequeñas que acaben pronto de votar a otros centros para el escrutinio.

Con todo, Gaspar señaló que se trata de la "letra pequeña" de las primarias, por lo que se limitó a sugerir que “no costaría nada pedir disculpas”. “Ya sabemos que es un proceso nuevo”, concedió, “pero si lo denuncio es por responsabilidad”. Según Gaspar, son problemas que obedecen a “una forma arcaica de hacer política” que hay que superar. Respecto al aprovechamiento por parte del PP y el presidente de la Generaaitat, Alberto Fabra, de sus críticas para poner el dedo en la división de los socialistas, Gaspar negó a Fabra cualquier legitimidad. “No está para dar lecciones”, dijo, tras recordar que “el PP ha llevado la política valenciana a las cotas más grandes de descrédito”.

El candidato negó que, con sus denuncias, trate de ponerse la venda antes de la herida de una derrota el domingo ante Puig: “Primero dijeron que no me presentaría, después que no reuniría los avales; ahora será la tercera vez que se equivoquen”.

Puig, a su vez, insistió en el último tramo de la campaña en reclamar “una victoria contundente para conseguir el cambio en la Comunidad Valenciana”.

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