Álava endosa la responsabilidad de armar un consenso interno a Quiroga

La pugna por el liderazgo en el PP vasco y la consecuente incógnita sobre los cambios que su presidenta, Arantza Quiroga, hará en la ejecutiva van camino de extenderse hasta casi las puertas del congreso extraordinario del 7 y 8 de marzo. Quiroga no va a adelantar ninguna propuesta concreta hasta reunirse con las juntas directivas de los tres territorios y la más complicada de esas citas, la que mantendrá con la alavesa, se retrasará previsiblemente hasta finales de la próxima semana.

La presidenta mantiene su objetivo de relevar a su número dos, Iñaki Oyarzábal, y reforzar su liderazgo frente al peso que sigue teniendo el líder alavés y portavoz en el Congreso, Alfonso Alonso. Y desde Álava le siguen llegando mensajes, los últimos ayer mismo, de diálogo tanto como de resistencias. El propio Alonso, de nuevo en los pasillos del Congreso, único lugar donde ha hablado públicamente del conflicto, mantuvo su apuesta por Oyarzábal: “Tenía uno [candidato a la secretaría general] y tengo uno que me parece que es el que mejor lo ha hecho y que es una referencia”.

“Quiero hablar poco y hacer mucho, pero en positivo”, agregó Alonso, tras mostrar su voluntad de “fortalecer” a Quiroga en su cargo y su convencimiento de que “todo” estará solucionado para el día 8. Desde que Quiroga es oficialmente la única candidata a la presidencia “a quien le van a exigir un congreso unitario es a Alonso”, opina un parlamentario.

Más detallado se mostró su número dos provincial y diputado general alavés, Javier de Andrés, quien consideró que “corresponde muy especialmente” a la presidenta la responsabilidad de lograr un consenso que haga posible “la comodidad de todos” los miembros del partido y su “identificación” con el proyecto.

Quiroga intenta evitar que Álava interprete como un ataque a sus posiciones el cambio que quiere abordar en su ejecutiva. Y desde Álava se incide en ese mensaje de la “comodidad” de todos, que De Andrés ya lanzó el viernes, haciendo valer la relevancia del único territorio donde el PP gobierna. La presidenta guarda entre sus opciones designar a un segundo alavés que no sea Oyarzábal, algo que ve “muy factible” un dirigente de esta provincia. “Los vizcaínos no están cerrados en absoluto”, agrega.

De Andrés dijo ayer que no ha recibido propuesta alguna de ocupar el puesto. Su opción chocaría de entrada, dado su cargo público, con la apuesta de la presidenta por alguien volcado en dinamizar el partido. Dirigentes de otros territorios ven complicada esa hipótesis, a lo que un representante alavés, tras insistir en que no hay nombres sobre la mesa, replica que no causaría “ninguna distorsión” y dependería solo de la voluntad teórica o no del propio diputado general.

Dentro de su ya conocida intención de trabajar de puertas para adentro y en medio de la polémica abierta, Quiroga quiere trasladar personalmente a las tres juntas directivas el modelo de partido que quiere armar, el porqué del proceso que ha puesto en marcha y sus planes de futuro “sin entrar en nombres”, según fuentes de su entorno. La convocatoria de las juntas corresponde a las direcciones territoriales y Gipuzkoa y Bizkaia ya le han puesto fecha: hoy y mañana, respectivamente. La primera, según fuentes provinciales, llevaba tiempo en el calendario.

La de Álava se retrasará a la semana entrante, oficialmente porque Alonso está “centrado” en la preparación del debate sobre el estado de la nación, que se celebrará los próximos días 25 y 26. “Es lógico que tengan sus resistencias”, en una organización controlada por completo por Alonso y Oyarzábal, asumen fuentes del partido. En el entorno de Quiroga se asegura que esa cita pendiente no despierta preocupación.