“Siempre hemos ido contra el poder”

Le metieron un cero a la película Posición avanzada, de Pedro Lazaga, y en su crítica era calificada como “una masturbación mental”. Corría el año 1966. Aquello le costó a la Cartelera Turia, que había nacido dos años antes, una multa por “falta al decoro”. La dictadura franquista mantenía prietas las filas cuando la guía empezaba a sentenciar con sus calificaciones de cero a cinco. Hasta cinco veces fueron multados y una vez fueron apercibidos de cierre por una portada homenaje a Salvador Allende con motivo de su muerte en 1973.

Hubo que afrontar dilemas como la puntuación del documental hagiográfico Franco, ese hombre, de José Luis Sáenz de Heredia, cuyo guión dio forma una comisión interministerial presidida por Manuel Fraga. “Había miedo por ponerle un cero por las consecuencias que podría comportar, así que se optó por poner un asterisco, que no remitía a nada”, recuerda Vicente Vergara, actual director de la Turia, una pequeña publicación que cumple este fin de semana 50 años de vida, a pesar de los graves problemas que le ha generado la crisis económica y la revolución digital. Un caso insólito en el panorama comunicativo, como explica el periodista Manuel S. Jardí en Quaderns de Ciències Socials de la Universitat de València.

Insólito no sólo por su medio siglo de vida, sino también por su mezcla de crítica cinematográfica, teatral y gastronómica, comentario político, humor transgresor, espacio dedicado al denostado cine X o por sus premios anuales que convocan a más profesionales del cine y de la cultura que muchos festivales. “Es una cartelera de cine y una revista cultural, con carga política de izquierda”, según definición del actual director de la publicación semanal, fundada por cuatro jóvenes (Pepe Aibar, Manuel Mantilla, Julio Guardiola y Enrique Pastor), baqueteados en largas sesiones de cine-fórum universitario y reclutados por el impresor Miguel Zamir para competir con la entonces muy popular Guía Bayarri.

Vergara incide en que ya el primer número de Turia recomendaba el filme El eclipse, de Antonioni, una apuesta por el “cine de autor” que se ha mantenido a lo largo del tiempo. Y asegura que las acusaciones de sectarismo y antiamericanismo no responden del todo a la verdad. “Era un contexto político e histórico muy determinado y hay que analizarlo así. Pero nosotros siempre hemos ido contra el poder y siempre hemos defendido y puntuado muy alto al cine de Billy Wilder, de Alfred Hitchcock, los musicales de Gene Kelly o los westerns de John Ford”, señala. ¿No se miraba mejor a las películas de cineastas, próximos al Partido Comunista Italiano (PCI), por su militancia? “Podía haber simpatía pero no había una crítica homogénea. Tal vez en Queimada, de Pontecorvo, una película mítica para un sector de la izquierda, no merecía un cinco, como le pusimos. Y yo no le pondría ahora un cinco a Muerte en Venecia, de Visconti,con esos zooms tan en boga en la época pero que ahora tanto chirrían, pero sí mantendría el cinco a la maravillosa El gatopardo”, comenta Vergara. También han recibido algunas críticas desde sectores feministas por sus calendarios eróticos, que ahora editan con modelos femeninos y masculinos

Un libro recoge las portadas de Miguel Calatayud para la publicación

Con motivo del 50 aniversario, la editorial Media Vaca acaba de publicar un estupendo libro que reúne las portadas de Miguel Calatayud. Y entre el programa de actividades, se exhibirá en verano, en la Nau de Valencia, una exposición con 25 obras de reputados artistas y diseñadores y otras tantas de jóvenes creadores en homenaje a la publicación.

Cartelera Turia planea renovarse y lanzar una completa edición digital. La crisis económica, la caída de la publicidad y la extensión de Internet se han cebado con ella y con los medios de comunicación. “Nuestro propósito es sobrevivir”, concluye Vergara.