Una huelga de 12 horas paraliza TV-3 y Catalunya Ràdio

Reportajes enlatados en televisión, música en la radio... Los espectadores de los medios públicos catalanes no pudieron disfrutar ayer de la programación habitual de TV-3 y Catalunya Ràdio por el conflicto que mantienen los trabajadores y la empresa. Los empleados paralizaron los medios públicos con una huelga de 12 horas que, según los comités de empresa de la televisión y la radio, tuvo un seguimiento masivo: un 95% en el caso de TV-3 y un 90% en Catalunya Ràdio. La Corporación Catalana de Medios Audiovisuales evitó dar cifras propias de seguimiento a la huelga.

La huelga impidió la emisión de los noticiarios de mediodía, el TN comarques y el TN Migdia. Los servicios mínimos estipulaban que ambos informativos tendrían una duración limitada por la huelga, pero un cordón humano hecho por los trabajadores impidió su emisión. El comité de empresa aseguró que no pudo evitar la acción ya que se organizó de forma espontánea.

Convenio colectivo

Los trabajadores de los medios públicos protestan por el descenso de salario que la empresa quiere incluir en el nuevo convenio colectivo. El actual caduca el día 31 de enero, y los trabajadores quieren alargar su vigencia para tener más tiempo para negociar y que la empresa rebaje su intención de disminuir en 15 millones de euros la masa salarial. El miércoles, empresa y trabajadores tendrán una nueva reunión. Los empleados, tras el encuentro, decidirán si ratifican una nueva huelga convocada para el jueves, de 24 horas.

Las dos movilizaciones de esta semana son el preludio de una protesta mayor. Los trabajadores tanto de TV3 como de Catalunya Ràdio pidieron a sus respectivos comités de empresa que estudie la posibilidad de convocar una huelga indefinida si la empresa no rebaja sus pretensiones salariales y no permite una prórroga del convenio para negociar.

Los problemas entre los gestores y trabajadores de la CCMA se arrastran desde la negociación del ERE que acabó con 225 empleados en la calle. Los comités de empresa denunciaron entonces la actitud del presidente de la CCMA, Brauli Duart, y consideran que las formas siguen sin ser las adecuadas. Los trabajadores denuncian además la voluntad de “externalización” de los medios, iniciada con la privatización del departamento comercial de TV-3.